Microsoft detectó durante el fin de semana una falla de seguridad que afecta a su popular navegador Internet Explorer, y afirmó que ya descubrió intentos de aprovecharse de este problema en la web.
La falla concierne a las versiones 6 a 11 del navegador, informó la compañía, que hizo referencia a la existencia de "ataques limitados y dirigidos".
"Un atacante podría crear una página de internet especialmente para explotar esta vulnerabilidad a través de Internet Explorer y convencer a un usuario de que visite esa página", explicó Microsoft en un blog especializado en cuestiones de seguridad.
La firma de ciberseguridad FireEye, que afirma ser quien descubrió la falla, asegura que piratas informáticos intentan utilizarla a través de una campaña denominada "Operation Clandestine Fox".
Los usuarios de la versión XP de Windows podrían verse particularmente afectados por el problema, ya que la compañía retiró el mes pasado las actualizaciones de seguridad automáticas para esa edición del software.
Esta falla se suma a otra en la protección de datos encriptados, denominada "Heartbleed", que fue descubierta a principios de abril y permitía a piratas informáticos recuperar de las memorias de servidores datos brindados durante conexiones seguras.