La "Odalisca con pantalón rojo", pintura del francés Henri Matisse valorada en unos tres millones de dólares que fue robada misteriosamente del Museo de Arte Contemporáneo de Caracas y recuperada por Estados Unidos, fue expuesta nuevamente este martes en la capital venezolana.
"La actividad de hoy es posible gracias al esfuerzo conjunto que las instituciones del Estado desarrollaron para hacer las diligencias complejas requeridas para la repatriación de las obras de arte", dijo el ministro de Cultura Fidel Barbarito en un acto al que asistió un centenar de personas.
El óleo, que vuelve a estar en exhibición después de más de 14 años, fue trasladado a Venezuela el 7 de julio procedente de Austin, Texas (sur de Estados Unidos), tras ser entregado por autoridades estadounidenses al gobierno venezolano.
La fiscal general Luisa Ortega Díaz, también presente en la cita, anunció que su despacho continuará indagando detalles del hurto.
"Me quiero comprometer con todos los amantes del arte con que el ministerio público va a hacer la investigación correspondiente a los fines de determinar la responsabilidad de quienes aparezcan como autores o cómplices del extravío de esta obra", expresó Ortega Díaz.
El robo de "La Odalisca", que muestra a una mujer de cabellos oscuros sentada sobre sus piernas, el torso desnudo y vistiendo un pantalón rojo, siempre ha estado rodeado por el misterio, pues se desconoce su fecha exacta.
Se presume que ocurrió entre 1999 y 2002, pero fue en 2003 cuando las autoridades venezolanas se percataron de que la pieza expuesta era una mala copia.
Marianela Balbi, directora ejecutiva del Instituto Prensa y Sociedad (IPYS) en Venezuela, investigó este caso y en 2009 publicó sus conclusiones en el libro "El robo de la Odalisca", según el cual la obra trató de ser vendida en México por 740.000 dólares.
En octubre de 2012, agentes encubiertos de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Estados Unidos hallaron la obra en una habitación del hotel Loews, en Miami Beach, tras hacerse pasar por compradores interesados en el lienzo.
A finales de enero de 2013, una corte federal de Florida sentenció a prisión al cubano-estadounidense Pedro Antonio Marcuello Guzmán y a la mexicana María Martha Elisa Ornelas Lazo, acusados de intentar vender la pintura.
La obra había sido comprada en 1981 por el otrora Museo de Arte Contemporáneo de Caracas Sofía Imber.
Autoridades de Estados Unidos y Venezuela cooperaron en este caso no obstante las fuertes tensiones diplomáticas entre ambos gobiernos, que han llevado a la expulsión de varios funcionarios de la embajada estadounidense en Caracas en poco más de un año.