En varios países latinoamericanos se realizan cada diciembre fiestas y eventos para despedir el año que termina. Chile, Brasil, Uruguay y México tienen algunas de las más reconocidas festividades, que atraen un gran número de turistas, muchos de ellos que pretenden iniciar los nuevos 12 meses de una forma poco convencional.

Al norte del continente, en México está Calakmul, en el sureste del estado de Campeche. Es un tesoro arqueológico maya en la región del Petén, cerca de la frontera con Guatemala. Es una zona del país bastante cálida, contrario al frío que se espera para el invierno en el hemisferio norte.

Un poco al nororiente está uno de los paraísos caribeños más populares de la región y el más importante de México, Cancún. Dado el gran número de lugares sagrados en estos puntos, se realizan rituales y ceremonias ancestrales, todos relacionados con la cultura Maya que dominó la región antes de la conquista española.

En el caribe la ciudad colombiana de Cartagena también es un sitio habitual para la época. Las playas, plazas y hoteles de La Heróica reciben cada año a cientos de personas que buscan contagiarse de la gastronomía, cultura y diversidad local, en medio de un contexto colonial.

Al suroccidente suramericano está Río de Janeiro, catalogada como una de las ciudades de la fiesta eterna, donde sus playas, bares, calles y música la convierten en uno de los mejores destinos para recibir el nuevo año, si se pretende estar de 'rumba' completa.

Mas al sur está Uruguay, que también es elegida por miles de turistas para sus fiestas de fin de año. En la costa uruguaya existen varios balnearios como Punta del Este, Cabo Polonio o Valizas, que ofrecen fiestas únicas para personas de todas las edades.

En Chile están Valparaíso y Viña del Mar, en pleno centro del país, a dos horas de la capital Santiago, conocidas como las mejores playas latinoamericanas para esta fecha.

Allí las festividades inician días antes del 31 de diciembre y se extienden incluso hasta el 1 de enero en la tarde.

En este país austral también se encuentra Termas de Chillán, una localidad más al sur de Santiago pero opuesto al calor de Valparaíso y Viña del Mar. Este lugar ofrece termales, deportes en nieve y casinos para quienes prefieren el frío.

Hay otras fiestas musicales de diferentes géneros y festivales en ciudades latinoamericanas con increíbles alumbrados, como sucede en Medellín o Bogotá, que atraen a visitantes, tanto locales como extranjeros, para celebrar el último día del año y comenzar con pie derecho el 2019.