EN EL ámbito de Colombiamoda, hablamos con los diseñadores de Andrés Pajón en una entrevista excepcional sobre cómo han vivido la pandemia y a qué retos se enfrentan. Del entorno físico al digital y de puntadas de gala a costuras médicas, la firma de lujo se pone al servicio de la comunidad y saca su creatividad a lugares que creía imposibles.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué significa la colección de otoño invierno para Andrés Pajón?

FELIPE CARTAGENA: Es la revolución digital ya que es la primera vez que desarrollamos un producto para vender digitalmente. Es una colección que nunca vamos a olvidar pues la creamos en medio de la pandemia y llega como un mensaje de esperanza y un rayo de luz basado en un discurso simple y altamente poderoso.

ENS: ¿Qué opina sobre la apuesta actual de la industria por prendas más funcionales y versátiles?

FC: Creo que aunque hagamos prendas más portables no podemos abandonar nuestro know how pues tarde o temprano llegará una nueva normalidad para celebrar. Por eso en otoño invierno hay gala de Andrés Pajón al igual que la línea de cóctel, pero muy simple y pequeña la cantidad, si bien es llamativa y nuestro ADN se mantiene fuerte.

ENS: ¿Qué consecuencias ha traído la crisis para la marca?

FC: Llevamos cuatro meses sin vivir de nuestra marca porque las ventas se cayeron en un 99%; como creativos tuvimos que adaptarnos y llegar a otro segmento que es el médico para poder sobrevivir.

ENS: ¿Cuál es el nuevo parorama de la moda y ustedes cómo se han podido adaptar?

FC: La industria de la moda en este momento recuerda a lo que pasó en la Primera y en la Segunda Guerra Mundial, en el sentido que los ateliers de moda se prestan al servicio de la comunidad. En este caso, nosotros creamos las líneas médicas que nos han enseñado a entender los procesos y los tiempos de una manera diferente. Es gratificante apoyar a los que realmente hoy están dando la batalla que son los médicos.

ENS: ¿Cómo han vivido esta situación desde la parte interna de la compañía?

FC: En abril entregamos nuestra tienda principal de Medellín, de 500 metros cuadrados, no teníamos cómo mantener cerrado un punto de venta de ese tamaño. Afortunadamente encontramos el apoyo de la Clínica Victoriana y esto nos ha permitido pagar la nómina y parte de los gastos fijos. El resto, que representa casi un 50%, sale de nuestro patrimonio, ahorros, créditos y de las ganancias antes acumuladas. Todo esto para conservar a nuestros empleados porque, a pesar del apoyo de nuestros clientes, no se llega a un punto de equilibrio, pues llevamos cuatro meses entre un 30% y 40% en las ventas.

ENS: ¿Por qué se vieron tan afectadas las marcas colombianas en esta coyuntura?

FC: Colombia hizo un trabajo muy importante en relación al diseño colombiano, ya que lo posicionamos como un producto exclusivo dentro del armario de nuestros consumidores. En ese sentido, los colombianos compran diseño local pero lo guardan para ocasiones especiales, por eso nos hemos visto tan afectados pues ahora mismo no hay celebraciones y nos tenemos que adaptar.

ENS: Andrés, en su caso, ¿cómo ha recibido la coyuntura como diseñador de la marca?

ANDRÉS PAJÓN: Nosotros vemos oportunidades en los fracasos. Encontramos nuevos caminos para desarrollar nuestra creatividad que antes no veíamos o que la gente pensaba que no se podían hacer. La situación también nos obligó a crear la página web y a habilitar el e-commerce, es un momento de cambio y el proceso de adaptación tiene que ser inmediato.

ENS: ¿Cree que el tipo de consumo va a variar en la compra del lujo local?

AP: Las marcas colombianas hacemos prendas de excelente calidad y eso no va a morir así estemos en tiempos de coronavirus, porque nuestro cliente valora el trabajo que hay detrás de una pieza, lo aprecia y va a seguir comprándolo.

ENS: ¿Cree que después de esta situación, las pasarelas virtuales podrían llegar a reemplazar a las físicas?

AP: Puede que baje su intensidad y que los desfiles digitales tomen ventaja pero en realidad los seres humanos somos de sensaciones y emociones, por lo que esta tradición no se va a perder. Es más, pienso que pueden llegar a complementarse.

ENS: Por su parte Felipe, ¿cómo percibe el futuro de estas plataformas en la parte comercial?

FC: La gente piensa que los desfiles son solo el show pero una pasarela factura mucho, no solo en inventarios sino también en comunicación y promoción. Por lo que de una u otra manera deben ser pensados como una herramienta comercial muy fuerte. El formato físico volverá incluso más fuerte que antes, pero es una oportunidad para repensar la forma de hacerlos que se vuelvan más conscientes y amigables con el medio ambiente.

ENS: ¿Qué cambios podrían venir para el mundo de la moda?

FC: Los diseñadores estamos cansados del frenético ritmo de la moda porque cada vez nos piden más colecciones en tiempos más cortos, eso no queremos que vuelva ni tampoco tener horarios tan agotadores. En Andrés Pajón queremos hacer colecciones más grandes para presentar en el mismo momento, como ya lo hacen algunas firmas internacionales que unen en pasarela lo masculino con lo femenino. Es repensar el producto porque financieramente creo que tenemos dos años para volver a recuperarnos.

VESTIDO de la colección de otoño invierno. /Foto cortesía Andrés Pajón