La veritá: mezcla de poesía y surrealismo | El Nuevo Siglo
Martes, 15 de Abril de 2014

Por: Mónica Pérez

Especial para EL NUEVO SIGLO

 

Los tapices que pintó Salvador Dalí en Nueva York para su versión de Tristán e Isolda en el ballet paranoico Tristan Fou, son la pieza vital de la obra La veritá que se presenta en el Festival Iberoamericano este fin de semana en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán.

Esta obra de arte es usada por la compañía Finzi Pasca, que propone un trabajo en el que la realidad y los sueños pisan el mismo territorio para mezclarse y confundir. Esta puesta en escena tiene como eje principal el desfile de cuadros vivientes que se fusionan en el cambio de telón dando paso a una experiencia circense luminosa, vital, ensoñadora y melancólica, en la que acróbatas, contorsionistas, clowns, músicos y equilibristas unifican el teatro con el circo.

De igual forma se destacará dentro de la puesta en escena el carácter poético, típico de esta compañía, para dejar en la memoria de los asistentes la sensación de haber presenciado un espectáculo único lleno de arte, poesía e inspiración.

El mayor atractivo de este montaje es el telón que mide 15  por 9 metros formando parte de la puesta en escena. Pero es importante resaltar que aunque la producción se apoya en este lienzo, también se basa en el teatro acrobático sin dejar a un lado el sello característico del coreógrafo y clown suizo, Daniele Finzi Pasca.

EL NUEVO SIGLOconversó con uno de los actores de esta producción, Rolando Tarquini, quien comentó que “la pintura fue prestada por una fundación para poderla utilizar en escena”, ya que para los directores de ésta es muy importante que la reconocida obra de arte se dé a conocer a través del teatro como lo quiso desde un principio Dalí. Y aunque el telón tiene muchos años, pues fue pintado en 1944, se encuentra en perfecto estado.

La pieza es integrada a la obra desde una escenografía visual que se soporta en la difusión de muchas imágenes para formar una composición de elementos con los cuales se juega dentro de la puesta en escena.

La magia creativa que produce la pintura de Salvador Dalí más la fuerza de la Compañía Finzi Pasca “convierten a La veritá en una obra que desafiará la inteligencia de los asistentes haciéndoles creer que todo, absolutamente todo, puede ser real”, expresa Tarquini.

La obra del artista español se destaca, ya que según el intérprete “suma como un personaje que hace parte del espectáculo, gracias a sus movimientos y su ubicación en la mitad del escenario”. Asimismo, el lienzo resalta por tener este toque poético que ya se ha visto en presentaciones anteriores como Donka, Rain o Ícaro, de la misma compañía.