El pequeño robot japonés Kirobo volvió a la Tierra tras haber pasado 18 meses en la Estación Espacial Internacional (ISS), anunciaron el jueves los promotores de este programa de investigación científica.
El androide, que tiene el tamaño de chihuahua, partió en agosto de 2013 a la ISS y participó junto a los científicos de la estación en varios experimentos para estudiar la utilidad de un robot de compañía en situaciones de aislamiento prolongado.
Kirobo es capaz de mantener una conversación de manera natural, según su principal inventor, el ingeniero Tomotaka Takahashi, que trabajó en el proyecto junto a la Universidad de Tokio, la compañía Dentsu y el constructor de automóviles Toyota.
El robot acompañó al astronauta Koichi Wakata en el módulo japonés de la ISS y sus vivencias han sido seguidas durante meses por los niños de las escuelas japonesas.