Nuchas personas se identifican con el trastorno del sueño conocido como jet lag, aunque en ocasiones no saben que se llama de esa manera ni lo que realmente puede llegar a generar en quien lo padece. Por ello, aquí les contamos un poco sobre esta condición y lo que se debe hacer para enfrentarla.

El “reloj interno” que tenemos, o ritmo circadiano por el que nos regimos, permite regular biológicamente nuestros tiempos de sueño y descanso. Este “reloj” se sincroniza con los períodos de luz y oscuridad del lugar donde nos encontremos; desde luego, los horarios en los que estamos habituados a realizar nuestras actividades del común.

Esta sincronización es la que permite que estemos activos durante el día y dormir durante la noche. Por esta razón les traemos unas recomendaciones que sabemos les pueden funcionar para cuando llegue el momento en que este horario se altere.

1. Primeramente, es importarte prepararse para evitar el jet lag un poco antes de empezar el viaje y dormir bien la noche anterior.

2. Llegar al destino por la mañana o a primeras horas de la tarde; pese a que se puede acabar muy cansado, se alcanza la noche con sueño y se puede dormir durante las horas de oscuridad.

3. La hidratación es importante, ayuda a que nos sintamos mejor con el nuevo huso horario.

4. Evitar consumir bebidas alcohólicas, cafeína y/o estimulantes.

5. Darse una buena ducha. Una vez en el destino es bueno tratar de relajarse; esto le ayudará a manejar mejor las horas restantes del día antes de ir a descansar y liberar toda la tensión acumulada.

6. Clave durante el vuelo es poder levantarse un poco y realizar estiramientos. Si el momento de la llegada al destino es por la tarde-noche, se debe intentar no dormir mucho en el viaje, para que al llegar resulte más fácil conciliar el sueño. Si se llega por la mañana, es mejor tratar de dormir durante el trayecto para estar más activo al arribar al lugar de destino y así sentirse bien.

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Los efectos de la descompensación horaria suelen durar entre uno a tres días, todo depende de cada persona, de su organismo, su edad, pues se ha podido determinar que en niños y en adultos de más de 50 años este tipo de efectos son más dominantes. Aunque es imposible evitar el jet lag, lo que sí podemos es contrarrestar los síntomas, siempre y cuando pongamos en práctica las recomendaciones anteriormente mencionadas.

Los expertos de EMMA Sleep aconsejan que, sin importar la actividad que realicemos, es de suma importancia cuidar nuestros hábitos de sueño. “El sueño juega un papel vital para mantenernos en forma y saludables. Cuando duermes mucho te despiertas siendo la mejor versión de ti mismo, pues le has dado a tu mente y cuerpo el tiempo que necesita recargarse y despertar sintiéndote renovado”, explica Verena Senn, neurobióloga y jefa de investigación del sueño en Emma – The Sleep Company, quien aclara por qué descuidar las rutinas de sueño y continuar con los malos hábitos a la hora de dormir podría ser perjudicial para la salud.

En el caso de los “meeting planners”, quienes manejan una agenda llena de viajes, el estrés de trasladarse en avión, así como el jet lag, es algo inevitable, pero aun así ellos o cualquier persona debe hacer el esfuerzo de acostumbrarse a viajar por varias horas, así como habituarse al cambio de horario y tratar de manejar esta afección de la mejor manera, tratando de seguir los consejos anteriores para que lograr disminuir los niveles de cansancio, tensión y estrés.

Después de esto, lo que sigue es disfrutar los viajes. Así que a ponerse las pilas y a gozarse estos últimos días de descanso en Semana Santa.