Una obra que toca el tema de las relaciones de pareja de forma divertida se podrá disfrutar en Hombre con Hombre, Mujer con Mujer, una historia que enseñará a más de uno que el amor es cuestión de dos.
Desde el primero de agosto hasta el dos de septiembre los bogotanos podrán ver en las tablas del Astor Plaza a Silvia de Dios y Fernando Solórzano protagonizar una historia llena de humor y sinceridad.
La vida en pareja a veces se torna difícil y llegan momentos en los que frases como “démonos un tiempo”, “te mereces algo mejor que yo” o “en qué piensas”, quieren decir que algo está pasando.
La obra es dirigida por el polaco Pawel Nowicki y fue escrita por Dago García. Allí los planes, la armonía, la felicidad, el amor y la confianza que existen entre Marcela y Gonzalo, protagonistas de la historia, tropiezan con un particular episodio que desencadena un sinnúmero de situaciones reveladas a través de un lenguaje cómico, irónicoy muy ácido, que llevará al espectador a un sorprendente e inesperado desenlace.
Hombre con hombre, Mujer con mujeres de las frases más famosas que quedó en el recuero de los colombianos desde hace tres años. Hoy, se convierte en el punto de partida de una relación de pareja que, llevada a las tablas, interactúa con el público asistente haciéndole tomar partido.
Los hombres del público se sentirán plenamente identificados con el tranquilo, comprensivo y mesurado Gonzalo, mientras que las mujeres lo harán con la franca, atormentada y dolida Marcela.
La historia inicia con la mudanza de Marcela y Gonzalo, que llegan a un nuevo apartamento con una docena de cajas y también con el sofá que les obsequió en su matrimonio Angélica, la mejor amiga de Marcela. Hasta ese momento todo va tranquilo y las energías fluyen.
Sin embargo, algo inquieta a Marcela, quien empieza a indagar sobre el verdadero motivo de tal regalo y es así como el “demonio” de la infidelidad llega a su cabeza.Ella intenta enredar y desenredar esta historia que parece tener algo de detectivesca.
Haciendo sus propias conclusiones, logra transformar a su esposo en una historia que aparentemente no va más allá de la imaginación. Gonzalo tendrá que enfrentar en adelante los ataques, análisis y diagnósticos de Marcela, que, poniendo en práctica sus cinco semestres de Psicología, no sólo llega al verdadero fondo de la situación, sino que además maquina un plan, que al final no se sabe si es tan perfecto como ella lo planeó.
Prepárese para disfrutar de estas divertidas escenas, en donde el amor, la confianza y al ternura no son el plato principal.