Por: Pamela López
Periodista de EL NUEVO SIGLO
La filarmónica Joven de Colombia se presentará en el New World Center de Miami, uno de los escenarios más importantes del mundo, en donde deleitará al público con el talento que recién florece en el país.
De esta forma, la Filarmónica Joven se convierte en la primera Orquesta latinoamericana que visita este recinto cultural; la cita será el 26 de este mes. De este evento y de lo que interpretarán en su debut habló con EL NUEVO SIGLO su director Alejandro Posada, quien también comentó que por segunda vez compartirán escenario con Eduardo Rojas como solista en el piano.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es el repertorio que van a presentar en el New World Center de Miami, Florida?
ALEJANDRO POSADA:Tiento sobre el primer tono y Batalla Imperial de Cristobal Halffter, concierto para piano Nº 2 de Sergei Rachmaninoff en el cual tendremos a Eduardo Rojas como solista, Suite Pájaro de Fuego (1919) de Igor Stravisnky y Pinos de Roma de Ottorino Respighi.
ENS: ¿Qué representa para la escena musical del país que ustedes ofrezcan este concierto?
AP: Realmente es importante, porque en los últimos 15-20 años ha mejorado mucho la escena musical del país y esto representa precisamente el trabajo bien hecho. La idea es mostrar con mucha claridad una orquesta juvenil que es capaz de representar a Colombia en un escenario donde, por lo general, se presentan los mejores del mundo. Entonces este viaje es para nosotros un reto muy importante al representar la nueva generación de músicos nacionales.
ENS: ¿Cuál es la razón del concierto en el New World Center?
AP: El New World Center es la sede del New World Symphony, una institución muy afín a los proyectos que se están dando hoy en día en el país y sobre todo al de la Filarmónica Joven de Colombia. Esta visita es un gran primer paso para la naciente relación del NWC con la Filarmónica Joven de Colombia. La New World Symphony es la única academia orquestal permanente que tiene Estados Unidos y está en constante cooperación con los proyectos musicales en Colombia, como la Academia Filarmónica de Medellín.
ENS: ¿El apoyo y creación de semilleros para que la población infantil y adolescente encuentre nuevos caminos a través de la música siguen siendo insuficientes en el país?
AP: Insuficientes en el sentido de que somos muchos millones de colombianos y llegar a todos es una labor muy difícil. Pero no ha sido poco el trabajo en este aspecto, porque hay una nueva generación y no sólo de músicos, sino también de jóvenes afines a la música que, aunque tengan otra profesión, la han aprendido a conocer, a respetar, a querer y han sido distintos por estos programas que se han llevado a cabo. Pueden ser más pero creo que el programa viene muy bien enfocado.
ENS: Antes de viajar a Estados Unidos harán una gira por algunas ciudades del país de forma gratuita ¿Cómo ha sido ese acercamiento del público con la música clásica?
AP: Una de las tareas principales que tiene la Filarmónica Joven de Colombia es que debe enseñarle al público lo que ellos aprenden. Estos encuentros son gratuitos porque queremos que todas las personas se acerquen a ver la Orquesta y no es solamente en los conciertos, sino es el hecho de reunir 12 departamentos en este encuentro y luego ir a tocar a algunos en los territorios de donde vienen sus músicos. Es un acercamiento distinto de los que se hacen en los conciertos de música clásica de otras orquestas. Esto va más vinculado al afecto que les tienen porque sus muchachos están tocando ahí.
ENS: ¿Ha crecido el aprecio por este tipo de música en el país?
AP: Sí. Uno ve cómo está de difícil la consecución de público en el mundo, pero en Colombia ha crecido el aprecio hacia la música sinfónica, mientras que en otros países disminuye y es una preocupación grande en la programación de las orquestas.
En el país vamos en aumento porque se han llevado a cabo en los últimos años programas sociales de gran relevancia desde el gobierno y desde entidades privadas para que la música sea cercana a mucha gente y, sobre todo, a personas que dada su condición económica, no podrían tener acceso. La música es una profesión y un hobbie para algunos bastante caro hablando de un instrumento y de estudiarlo. Es por esto que existen programas en el país, que no más contando Medellín son 5 mil estudiantes de música y en Bogotá en el plan Batuta más de 40 mil.