La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por su sigla en inglés) anunció el martes la entrega a la compañía petrolera BP de la primera licencia de vuelo para drones.
El citado organismo autorizó a la empresa y al fabricante de sistemas de aviación no tripulados AeroVironment para usar un drone en el área de la bahía de Prudhoe en Alaska, donde BP busca petróleo y planea la instalación de oleoductos.
Las investigaciones empezaron el pasado domingo, usando un aparato Puma AE equipado con una cámara, de 1,4 metros de largo.
"Estos sondeos son otro paso importante para ampliar el uso comercial de aviones no tripulados", dijo el secretario de Transportes de Estados Unidos, Anthony Foxx.
"La tecnología está cambiando rápidamente, y las oportunidades están creciendo", añadió.
Para conseguir el permiso de vuelo, las empresas deben demostrar que sus drones no afectarán la seguridad y que su uso será de interés publico.
Algunas agencias públicas del gobierno estadounidense ya han usado drones para cuestiones de seguridad, rescates o previsiones meteorológicas.