HASTA PARA utilizar las redes sociales se tienen códigos de etiqueta, pues si estas no se utilizan con responsabilidad y neta conciencia se podría dejar al descubierto más de la cuenta, como sus problemas personales y vergüenzas. Por eso si usted no sabe si está manejando bien la red aquí le damos algunos consejos para que no vaya a meter la pata. 1. Cambiar el estado emocional cada que inicia una relación: Está muy bien eso de estar ilusionada con una nueva pareja y querer que la cosa vayan serias, pero hay que aprender a tomarse el tiempo suficiente para ver si la relación funciona o no. El problema de cambiar el estado sentimental en Facebook es que si la relación aún no tiene unas bases fuertes sobre las que asentarse, del mismo modo que se difundió la información que tiene pareja a los cuatro vientos, tendrá que echarse para atrás y escuchar rumores y especulaciones. 2. Publicar fotografías de la relación de pareja: postear muchas fotos con la pareja, en especial cuando se cambia seguido da cabida a especulaciones y preguntas innecesarias. 3. Hacer gala de inestabilidad emocional: Si no va por la vida contándole a todo el mundo como estás a nivel emocional, no tiene sentido utilizar las redes sociales para tal fin. Menos para dejar constancia de una bipolaridad. Un día estoy bien, otro día mal, al siguiente amo la vida, al otro odio a todo el mundo... Hay que saber filtrar las informaciones personales que se comparte y evitar darle poder a las personas de saber todo de uno mismo. 4. Difundir que se está pasando por una separación: Hay momentos de la vida que es mejor salvaguardarlos dentro del círculo más íntimo y no permitir que gente extraña pueda tener acceso a ellos. Atravesar por un divorcio no es fácil para ninguno de los miembros y es algo demasiado personal como para frivolizar en las redes sociales, mandando mensajes de tristeza, odio o rencor. 5. Subir estados o fotografías con infinitos hashtags: La moda de los hashtag está alcanzando niveles indescriptibles en lo que a su mal uso sale por los poros. Se crearon con el fin de titular y encuadrar las ideas o noticias que se difunden por la red, pero no como forma única de expresarse, mucho menos para hacerlos los protagonistas de las entradas que se crean en Facebook. Resulta molesto e incluso tonto. 6. Hacer del muro un lugar donde: Todos hemos tenido experiencias que nos hacen replantearnos el por qué seguimos queriendo compartir nuestra vida con el género opuesto, pero eso no es motivo para convertir el perfil de una red social en un campo de batalla para atacar al opuesto. Los trapos sucios es mejor dejarlos en casa. HOMBRES Y mujeres nos caracterizamos por ser maestros de la deducción y grandes oradoras, pero cerrarnos en detalles innecesarios por las redes sociales distorsiona nuestro comportamiento.