El primer contagiado con residencia en Asturias por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, que estaba ingresado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, desde el 28 de febrero, ha fallecido este jueves según ha confirmado el presidente del Gobierno del Principado a través de su cuenta de Twitter.
Se trata de Luis Sepúlveda (Chile, 1949), conocido escritor afincado en la localidad asturiana de Gijón. Según un comunicado de la Dirección de Salud del Gobierno de Portugal emitido el 1 de marzo, Sepúlveda estuvo en el norte de Portugal del 18 al 23 de febrero en un festival literario, presentando el inicio de los síntomas el 25 de febrero.
En aquel comunicado, no obstante, la Dirección de Salud del Gobierno de Portugal señalaba que informaciones posteriores apuntaban la existencia de síntomas durante su estancia en Portugal. Las autoridades lusas llegaron a pedir a todas las personas que estuvieron en contacto con Sepúlveda que informasen de su situación.
El escritor fue el primer caso registrado en Asturias por el nuevo coronavirus que causa la enfermedad Covid-19. El hombre se mantuvo estable dentro de su gravedad, tras llegar al HUCA el día 29 de febrero, día en el que se activó el protocolo por la enfermedad. El hombre había acudido previamente a un centro privado de Gijón donde se le diagnosticó una neumonía sin precedentes. Su esposa, que también estuvo ingresada, dio negativo por Covid -19.
Hijo de una enfermera mapuche y de un militante comunista, Sepúlveda nació el 4 de octubre de 1949 en Ovalle (Chile). En sus años de juventud, militó en el Partido Comunista de Chile y, tras ser expulsado, se afilió a la fracción del Partido Socialista llamada Ejército de Liberación Nacional.
Trabajó en el departamento cultural en el gobierno de Salvador Allende, donde se encargaba de difundir clásicos en ediciones populares, y llegó a ser uno de sus escoltas personales. Tras el golpe militar de Pinochet en 1973, Sepúlveda fue víctima de las torturas de la dictadura y estuvo encarcelado durante dos años y luego en arresto domiciliario tras una intervención de Aministía Internacional.
En 1977, salió del país y pasó por varios países lationamericanos, como Argentina, Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia y Ecuador. En 1979, participó en la Revolución Sandinista que puso fin a la dictadura de los Somoza en Nicaragua. Más tarde, viajó a Alemania y trabajó como periodista y fue coordinador en Greenpeace. Residía desde 1997 en Gijón (Asturias), donde fundó el Salón del Libro Iberoamericano de Gijón, que se celebra todos los años durante la segunda semana de mayo.
Publicó su primer libro a los 17 años, pero su saltó a la fama internacional llegó en 1989 con la novela 'Un viejo que leía novelas de amor', inspirada en su experiencia de convivencia con los shuar y que se convirtió en un superventas con numerosas ediciones y traducida a 60 idiomas.
Sepúlveda ha escrito una veintena de novelas, guiones y ensayos. Otros títulos destacables de su trayectoria son 'Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar', 'Nombre de torero', 'Patagonia Express' o 'Historia de un perro llamado Leal', entre otros.