Hoy, el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, escenario para la dignificación de la memoria de las víctimas y la construcción de una cultura de paz en Bogotá, celebrará sus tres años de apertura.
La idea de construir un Centro de Memoria se gestionaba años atrás por organizaciones de paz y de defensa de los Derechos Humanos que habían planteado la necesidad de crear un lugar para la dignificación de la memoria de las víctimas, de aporte a la memoria histórica y a la construcción de una cultura de paz. La consolidación de estas ideas se llevó a cabo en diciembre de 2013, cuando se inauguró el Centro de Memoria, que a la fecha ha vinculado de manera presencial alrededor de 300.000 personas.
El certamen denominado “Tres años construyendo memoria”, que se realizará desde las 9:00 a.m. hasta las 8:00 p.m. en las instalaciones del Centro de Memoria, contará con la participación de diversos colectivos artísticos y culturales.
Entre ellos el grupo musical La Mojarra Eléctrica, quienes interpretarán música tradicional afrocolombiana; el Laboratorio Tramaluna Teatro, con la presentación de la obra “Antígonas, Tribunal de Mujeres”; el grupo de danza Kaluá, con bailes que representan el folclor de las regiones colombianas; el programa Semillas de Paz, con la interpretación musical de Batuta y el acompañamiento de Marta Sáenz; el II Foro de la Red Tejiendo Páramos y el lanzamiento del video Tejiendo Montaña Andina y la intervención de los Oficios de la Memoria, con una noche de faroles, cantos y literatura.
Para resaltar la labor pedagógica, en esta jornada conmemorativa tendrá lugar el taller “La Paz es Ahora” que busca estimular en la ciudadanía una actitud favorable hacia la paz, la convivencia y la memoria, también se dará un reconocimiento a la labor pedagógica de los Oficios de la Memoria por su trabajo realizado en 40 colegios públicos de Bogotá.
Tras su apertura al público, este lugar se ha constituido en un espacio para el encuentro de diversos sectores que quieren recuperar el pasado para construir otro futuro. El Memorial por la Vida, que es la estructura más visible de ese complejo, fue elevado con el aporte de tierra sembrada de memoria por centenares de miles de personas que dejaron testimonios o mensajes de paz. Allí se encuentran registrados más de 45.000 nombres de víctimas fatales de la violencia política y sus violencias asociadas y se han incorporado simbólicamente los mensajes de paz de más de 270.000 jóvenes.
La idea de construir un Centro de Memoria venía gestándose años atrás por organizaciones de paz y de defensa de los Derechos Humanos, que habían planteado la necesidad de crear un lugar para la dignificación de la memoria de las víctimas, de aporte a la memoria histórica y a la construcción de una cultura de paz.
Esta apuesta se materializó en la propuesta de Indepaz acogida por la Secretaría Distrital de Gobierno en 2008. El Concejo de Bogotá incluyó en el Plan de Desarrollo 2008 – 2012 la creación del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación y en el Plan de Desarrollo Bogotá Humana 2012 – 2016 se incorporó el Centro de Memoria en el Programa Bogotá Ciudad Memoria dirigido por la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación.
Estas decisiones del gobierno de la Ciudad garantizaron su apertura con actos inaugurales realizados entre el 6 de diciembre de 2012 y el 9 de abril de 2013. Para su construcción, luego de estudiar varios posibles lugares, se decidió ubicar el Centro de Memoria en el antiguo globo B del cementerio, en el lote del ahora Parque de la Reconciliación.
Durante cuatro años se realizó un proceso participativo que comenzó con el concurso arquitectónico encargado a la Sociedad Colombiana de Arquitectos y la escogencia del proyecto presentado por Juan Pablo Ortiz; miles de personas contribuyeron simbólicamente con aporte de puñados de tierra y de decenas de miles de testimonios. La decisión de construir el edificio en el antiguo Globo B implicó exhumar más de 3.000 restos de personas enterradas en el lugar. Fueron cerca de tres años de trabajo arqueológico realizado por el Equipo Científico de Investigaciones Antropológico Forenses – Eciaf – que le aporta dos siglos de memoria a Bogotá y al resto del país.