El robot Philae posado en un cometa entró en "hibernación permanente" y dejará de recibir instrucciones operativas por ser "casi nulas" las probabilidades de restablecer contacto, anunciaron este viernes los responsables espaciales europeos.
"Desgraciadamente, las probabilidades de restablecer contacto con nuestro equipo del centro de operaciones es casi nula y dejaremos de enviarle instrucciones, por lo cual sería muy sorprendente que recibamos una señal a partir de ahora", dijo Stephan Ulamec, responsable del centro aeroespacial alemán DLR.
"Una suave y lenta despedida, ha llegado la hora de decir adiós a Philae", titula el comunicado de la DLR. Sin embargo, los europeos tampoco cierran por completo la puerta a la eventualidad de un contacto.
El centro espacial francés CNES aclaró que a pesar de que no se enviarán más instrucciones al robot, el centro espacial de Toulouse "sigue escuchando a Rosetta, cuyas antenas siguen dirigidas hacia Philae, al acecho del menor respiro".
Al término de diez años de viaje como pasajero de la sonda Rosetta, Philae había logrado una hazaña sin precedentes en la historia de la conquista espacial, al posarse el 12 de noviembre de 2014 sobre el cometa 67P/Churiumov-Guerasimenko.
Equipado de diez instrumentos de observación científica, logró trabajar 60 horas antes de quedarse dormido, extenuado por falta de energía. En junio de 2015 volvió a despertar, pero desde el 9 de julio no ha vuelto a dar señales de "vida".