Por: Constanza Triana*
UNO de cada cuatro británicos que compraron un ebook durante el pasado año dicen que ahora leen ahora leen más que antes. Así, lo revela el estudio Books and e-Books UK 2014, realizado por Mintel, la reconocida empresa de estudios de mercado.
Contrario a lo que podría pensarse, la cifra asciende a cuatro de cada diez, cuando la edad del lector está entre los 16 y los 24 años. La causa según los encuestados es que los libros digitales son más baratos que los tradicionales libros en papel.
Los autores del estudio aseguran que “cada día, más británicos están recurriendo a los libros electrónicos debido al menor costo de la literatura. Aunque tres de cada diez compradores de libros electrónicos dicen que prefieren los libros impresos, compran libros electrónicos porque cuestan menos”.
Según los pronósticos de la industria editorial en Reino Unido, las ventas de libros electrónicos alcanzarán los 340 millones de libras esterlinas, este año, es decir, 40 millones más que durante 2013. Respecto a la hora de lectura, la cama es el lugar por excelencia, ya sea en las noches de los días laborales o en algún momento del fin de semana.
El crecimiento lento y tímido del libro digital no se siente solamente en la tierra de William Shakespeare, J.K. Rowling, Oscar Wilde, Agatha Christie, entre otros grandes escritores británicos. En el país, actualmente, el Laboratorio Digital de La Biblioteca Nacional de Colombia que es un área encargada de investigar y generar conocimiento al respecto, está realizando diversas actividades para entender estas nuevas dinámicas.
Justamente acaba de concluir la Semana del Libro Digital, iniciativa que a través de diferentes actividades como foros, conferencias y talleres generó una sana discusión sobre las transformaciones que está viviendo la industria editorial y por supuesto, los rumbos que deben tomar las bibliotecas para satisfacer las nuevas necesidades del público.
Para conocer el resultado de esta iniciativa, EL NUEVO SIGLO habló con María Alejandra Pautassi, Coordinadora editorial de la Biblioteca Digital- Biblioteca Nacional de Colombia.
ENS: ¿Cuáles son los retos para bibliotecas y editoriales de cara a la producción, acceso y distribución de libros digitales hoy?
MP: El potencial económico de las industrias culturales, incluyendo la de la producción de libros, se ha transformado en la era digital con el surgimiento de los nuevos modelos de negocio y distribución. Todos los días aparecen en el mercado nuevos formatos para leer libros digitales y soluciones de distribución, por lo que escoger un modelo de producción es cada vez más difícil. Algunas empresas han optado por desarrollar su propio software, otras por crear departamentos tecnología de la información inhouse y, otras, por contratar servicios externos a proveedores robustos. Si partimos de la premisa de que "cada decisión tecnológica es una decisión de distribución" cada uno de los modelos tiene implicaciones a largo plazo en costos y definición de públicos. Durante la II Semana del Libro Digital, empresas líderes del mundo editorial en Colombia hablan sobre sus experiencias.
ENS: ¿Cuál es el rol del editor/investigador cuando se habla de “contenidos digitales”?
MP: La infinidad de contenidos disponibles hoy en la red (algunos confiables, otros no) ha hecho que surja una nueva profesión en el entorno digital: la del curador de contenidos digitales. Híbrido entre el investigador, editor, crítico y divulgador, y es quien vela porque la información publicada sea relevante y confiable.
ENS: ¿Qué papel juegan los usuarios en la creación de estos contenidos?
MP:De un tiempo para acá, las redes sociales o las redes de creación de conocimiento colectivo están en boga. Las bibliotecas no han sido la excepción. El Laboratorio de la Biblioteca Pública de Nueva York ha desarrollado varios proyectos en los que los usuarios son quienes transcriben información de documentos patrimoniales, ese es el caso de What's on the menú. En otros casos, los usuarios se encargan de verificar los datos, tal como ocurre en Building Inspector donde es posible revisar mapas del siglo XIX que han sido digitalizados. Otro ejemplo: la plataforma 'Descubre', una especie de catálogo social de La Biblioteca Nacional de Chile, además de facilitar el acceso a documentos, permite que los usuarios participen en la creación de colecciones, a través del etiquetado social, la asignación de comentarios, la valoración y la posibilidad de compartir y difundir los registro en las redes sociales.
ENS: ¿Cuál es el resultado de Semana del Libro Digital en Colombia?
MP: Fue la segunda vez que hicimos actividad y pensamos en diversas temáticas. Todas tuvieron excelente acogida. Discutimos sobre cómo se redefine la experiencia de lectura en dispositivos móviles y, cómo son las nuevas posibilidades narrativas en digital. Otro tema vital fue la distribución porque es neurálgico analizar cuáles son los retos y oportunidades para editoriales y bibliotecas de cara a la producción, acceso y distribución de libros digitales. Por supuesto como biblioteca, hay un tema que nos inquieta mucho que es cuál debe ser la relación de las bibliotecas con sus potenciales usuarios y todos los cambios que estamos experimentando especialmente en lo que respecta la transmisión de conocimiento.
ENS: Para cerrar, ¿cómo se redefine la experiencia de lectura en dispositivos móviles?
MP:Tal vez, el principal cambio es que los elementos multimedia que integran video, audio y animación, y que muchas veces permiten crear contenidos colaborativos, han abierto las posibilidades de acercarnos a un texto, ya no solo desde la palabra escrita, ahora también con imágenes y sonidos.
*Periodista y asesora en comunicación corporativa