El disidente cubano Oswaldo Payá, muerto en julio en el accidente de un automóvil conducido por el joven político conservador español Angel Carromero, será homenajeado en Madrid con una calle que llevará su nombre, informó este miércoles el ayuntamiento.

"Oswaldo Payá Sardiñas, el histórico disidente cubano y líder del Movimiento Cristiano de Liberación, tendrá su homenaje en el callejero madrileño", informó la ciudad tras la aprobación de la propuesta en el pleno municipal, pese a los votos en contra de socialistas y ecolo-comunistas.

El delegado de las Artes del ayuntamiento madrileño, Fernando Villalonga, del conservador Partido Popular (PP, en el poder en España), rindió homenaje al líder disidente, fallecido a los 60 años, subrayando la "convicción democrática de Oswaldo y el deseo que tenía de un cambio en Cuba por la vía política".

Payá murió el 22 de julio junto a otro disidente, Harold Cepero, de 31 años, cuando se estrelló contra un árbol el automóvil en el que se dirigían hacia Santiago de Cuba acompañados por Carromero y el joven político conservador sueco Jens Aron Modig.

Dirigente en Madrid del movimiento juvenil del PP, Carromero, que conducía el vehículo, fue condenado en Cuba a cuatro años de cárcel por homicidio imprudente.

Tras un acuerdo entre los gobiernos cubano y español, fue repatriado en diciembre a su país, donde cumple condena en un régimen de semilibertad que le permite acudir a su trabajo como asesor en el ayuntamiento de Madrid.

En su decisión del miércoles, la municipalidad recordó que Payá fue candidato al premio Nobel de la Paz en 2002, 2003, 2008, 2010 y 2011.

Y que el parlamento europeo le otorgó en 2002 el premio Sajarov de derechos humanos en reconocimiento por el "Proyecto Varela", con el que el líder disidente "proponía un referéndum para una transición democrática y pacífica en la isla".

La familia de Payá exculpó a Carromero de toda responsabilidad en su muerte y exigió una investigación independiente a la del gobierno cubano.

Disidente cubanos en Madrid llamaron a Carromero a explicar públicamente lo ocurrido para erradicar "de forma definitiva las diversas teorías y rumores".