Envejecer es  tan inevitable como maravilloso. Las canas, arrugas y demás muestras visibles de la edad no tienen por qué ser complejo ni motivo de depresión, por el contrario, son aquellos ‘trofeos’ que la vida se ha encargado de otorgarle por cada una de las experiencias vividas y superadas.

Es así que hoy la invitación es a poner la frente en alto, sacar la mejor energía de aquellos años mozos en los que no tenía mayores preocupaciones, darle un giro a su vida si es que no ha estado muy conforme con ella, y a continuar con buena actitud si ha sabido sobrellevarla hasta entonces.

No le vamos a decir que las cremas anti-edad no funcionan, pero no hay mejor ‘remedio’ para proyectar una imagen mucho más fresca y jovial que la aceptación personal, con todos los defectos e imperfecciones, siempre poniendo por encima de todo al amor propio o autoestima. Deje por un momento los tratamientos y ponga en práctica los siguientes para sacarle el mayor provecho a la época más bonita de su vida: el presente.

Si bien los cánones de belleza que plantea la sociedad exigen una eterna juventud que no corresponde con las transformaciones naturales que atraviesa el cuerpo, hay que tener presente que son inevitables pero llevaderos.

No abandone el ejercicio

Con los años llegan los dolores musculares, las molestias en la espalda y el cansancio, sí, pero eso no es una excusa para dejar en el olvido la actividad física, ya que trae muchísimos beneficios a la salud y a su estado de ánimo, sobre todo, en la edad adulta. No es necesario que se exija lo mismo que cuando era más joven, con tan solo 40 minutos diarios de caminata ya estará cumpliendo con la meta.

Viva plenamente su intimidad

Muchas personas, sobre todo las mujeres adultas, dejan de disfrutar de su sexualidad porque no se sienten cómodas con su cuerpo o creen que es un asunto que ha pasado a la historia. Si esto le está pasando, es justo y necesario que se libere y se anime a probar con ropa interior sexy, por ejemplo, o tener una velada romántica al menor una vez por semana. De esta manera, podrá renovar los vínculos con su pareja, mejorar su autoestima y, sobre todo, vivir agradables experiencias. Por otro lado, al alcanzar los 50 ya no existe el temor del embarazo, por lo que la sexualidad se separa absolutamente de su función reproductiva. Por esta razón, hay quienes afirman que es la mejor época para vivirla con plenitud.

Cosas pendientes

Es hora de hacer eso que siempre quiso, pero que no pudo por falta de tiempo. Ahora es el momento de viajar, pintar o llevar a cabo un pequeño proyecto. No piense que la edad es un impedimento para los nuevos desafíos, por el contrario le permitirá enfocarse sin distracciones y con absoluta disponibilidad. Es posible que en el intento el camino sea complicado, pero poco a poco encontrará satisfacciones y resultados alentadores que le motivarán a seguir adelante.

No viaje al pasado

Si algún familiar o amigo pregunta quién es el/la de la foto, no se afecte. Su rostro y cuerpo han cambiado porque es una regla natural que a todos les llega. Aceptar su nueva imagen es fundamental para que logre ver cuanta belleza aún hay en usted. Muéstrese tal cual es.

Con coquetería

Por último pero no menos importante, cuide su piel, cabello y manos. Renueve cada tanto su guardarropa y no deje de lado los colores y los cortes de las nuevas modas. Tampoco es necesario que se vista con ropa muy ceñida al cuerpo o tacos muy altos para no desentonar.