EL MUNDO de la cultura, tanto en Colombia como en diferentes países, ha tomado el rumbo de la virtualidad como una solución ante el cierre de escenarios, cines y otros espacios públicos por el distanciamiento social en medio de una pandemia que ha llevado a hacer múltiples cambios en la manera de develar el talento del mundo a través de diferentes expresiones artísticas.

Sin embargo, no todos los efectos de esta emergencia de salud han sido negativos para este sector ya que al usar herramientas digitales, el acceso a los espectáculos, shows, conciertos, exposiciones de arte y fotografía es más sencillo para todo tipo de público.

“Creo que, durante esta pandemia, al tener una oferta tan grande y tan robusta en lo digital ha permitido que millones de personas conozcan lo que hace el teatro, en ese sentido nos hemos acercado muchísimo a las personas de todos los estratos”, le dijo en una entrevista a EL NUEVO SIGLO Ramiro Osorio, director del Teatro  Mayor Julio Mario Santo Domingo, uno de los gestores culturales que le ha sacado provecho a esta coyuntura, por medio de su programación virtual en plataformas como “Teatropedia” y “Teatro Digital” ha continuado con su objetivo principal desde su fundación y el de todos los centros culturales: el de llevar el talento en danza, música, teatro y arte a toda Colombia pero, que ahora en medio del mundo digital, lo hará hacia un público más grande e internacional.

Tablas versátiles

Por un lado, está el teatro que ha retomado sus historias y personajes desde las casas de los artistas, productores o directores. Ahora, sus escenarios son habitaciones, cocinas y salas donde se transmite desde dispositivos móviles a través de redes sociales o plataformas.

El Teatro Libre, con su franja “Versión Libre”, en la que publica en redes sociales un contenido dirigido a niños y adultos con lo mejor del mundo de la dramaturgia, el maquillaje y las historias; el Teatro Nacional, con sus programas “Vive el teatro TN Live”, “Conversaciones de plancha”, “Nostalgia teatral”, en los que muestra el detrás de escenas de algunas de las obras que se han presentado en años anteriores e incluso, puestas en escena nuevas se han transmitido a través de su canal de YouTube; o el Teatro Ditirambo, que de la mano de sus fundadores, Rodrigo Rodríguez y Margarita Gallardo, han llevado los personajes de sus obras de vuelta pero esta vez en la casa de la familia Rodríguez, ya que cada rincón se convirtió en un escenario para presentar a “Gilma Tocarruncho” o “El Ángel de la culpa”; son el ejemplo, por mencionar algunos, que el teatro aún sigue vigente en terrenos del mundo digital y que espera algún día volver abrir sus salas, pero con un plan b, una oferta amplia y versátil transmitida tanto en las tablas como en plataformas virtuales.

La música, una dosis de esperanza

Durante el aislamiento social los recitales, conciertos y shows musicales se han convertido en una manera de enviar un mensaje de alegría, en algunos casos, de sanación y esperanza. Un movimiento que empezó con los primeros espectáculos musicales desde las casas de las voces nacionales e internacionales más destacadas en la industria.

En los primeros días Alejandro Sanz y Juanes sorprendieron a sus fans con un recital virtual bajo el hashtag “#LaGiraSeQuedaEnCasa”, ya que los artistas tenían planeado su tour para presentarlo durante esa semana, que pasaría por Bogotá en el Movistar Arena, pero por el brote del nuevo coronavirus, que apenas comenzaba, lo aplazaron y en su lugar tocaron sus éxitos desde sus salas.

Una ola de conciertos virtuales se regó por diferentes países del mundo y los artistas se animaron a dar un mensaje musical, bajo esta estrategia de llevar la música a los hogares de millones de personas a través de redes sociales, entre ellos está la reconocida estrella de la ópera italiana Andrea Bocelli con “Music for hope”, donde su voz transmitió un mensaje de consuelo en el Domingo de Pascua, una época difícil en la que miles de feligreses esperaban con ansias celebrar la Semana Santa. Al tenor se sumaron grandes ídolos como Bon Jovi, Alejandro Fernández, Fito Páez, a la vez de las más prestigiosas orquestas filarmónicas y sinfónicas internacionales.

El género clásico no se quedó atrás, pues las grandes agrupaciones y orquestas del mundo comenzaron a realizar montajes grabando las melodías desde cada una de las casas de los músicos, luego se unían los videos y daba como resultado un recital a gran escala que se podía disfrutar sin necesidad de ir a los teatros.

Es así como la Orquesta Filarmónica de Bogotá con sus diferentes agrupaciones conmemoraron el pasado Día Nacional de la Memoria y la Solidaridad de Víctimas del Conflicto Armado con “Reciliencia en la tierra”, dirigido por Francisco Zumbaqué, además interpretaron “¡Soy colombiano!” el compositor tolimense Rafel Godoy; la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia, que entre otros, presentó “La música está siempre contigo”; y la Metropolitan Opera de Nueva York (MET) con sus transmisiones nocturnas, la Ópera Estatal de Viena y la Royal Opera de Londres, son algunos referentes del género que desde principios de la cuarentena no han parado de mostrar sus melodías a través de métodos digitales.

Redes sociales, las nuevas galerías

Tal vez una de las poblaciones que más ha impactado a la pandemia es el arte, ya que con los museos y salas de exposición cerradas los artistas se vieron en la tarea de seguir mostrando sus obras sin un público físico.

Una situación que dio lugar a las exposiciones virtuales, donde ahora el arte en sus diferentes modalidades podrá ser vista por un porcentaje más alto de espectadores que el de lo habitual.

Con una programación preparada los museos y galerías comenzaron el 2020, una agenda que tuvo que ser adaptada a la crisis de salud, así lo hicieron importantes centros culturales como el Museo de Arte Moderno de Bogotá que decidió inaugurar algunas de sus exposiciones a través de un live, redes sociales y en su página web, también el Museo Nacional de Colombia, que incluso, llevó el arte virtual a otro nivel con un desarrollo de una aplicación o herramienta que permite ver algunas de sus salas en 360 grados para hacer un recorrido inmersivo, pero esta herramienta no solamente ha sido aplicada por el Museo, sino también el legendario Teatro Colón, que lleva a sus visitantes a conocer su arquitectura histórica con una guía en cada pared o lugar destacado, así como también lo hizo el Museo del Hermitage, de San Petersburgo en Rusia, y otros escenarios más que en este tiempo en casa han puesto a disposición del público un amplio contenido virtual.

El mundo del cine y las telenovelas también han alzado su voz durante este tiempo con transmisiones de las películas más galardonadas y aclamadas por la crítica en diferentes plataformas o el ingenio de los directores de las series de televisión que ahora no necesitan de un estudio o un gran set de grabación, solo basta con la cámara de un celular para crear una producción. Así es como la cultura se ha “reinventado”, sí, una palabra que, aunque muchos evitan, salió en medio de la difícil situación que vive el mundo, pero que ha impulsado nuevas propuestas y ha permitido que las artes tengan un mayor reconocimiento.