El cine de Colombia, que en los años '70 era conocido como "cine de la pornomiseria", es ahora uno de los más ricos y diversos de América Latina, revela el Festival de Biarritz, que lanzó una sección dedicada a la producción cinematográfica de ese país.
Este Festival Biarritz América Latina, que se inauguró el lunes en la noche con "La Playa D.C.", un filme de Juan Andrés Arango que vuelca una mirada sobre la cultura afrocolombiana, presenta 16 cintas colombianas, algo que habría sido "impensable" hace sólo unos años, subrayó Annouchka de Andrade, del comité de selección del certamen.
El cine colombiano ha vivido "una verdadera explosión", y se debe a la legislación sobre el cine creada en 2003 en ese país, coincidieron cineastas, productores y responsables de cine presentes en el Festival consagrado a las culturas latinoamericanas, que se celebra desde hace 21 años en este hermoso balneario del País Vasco francés.
"Estamos cosechando los frutos de diez años de ley de cine", declaró Claudia Triana, directora del Fondo Mixto de promoción del cine Proimágenes de Colombia, en una entrevista con la AFP en Biarritz.
"En el 2003, se estrenaron en Colombia tres largometrajes nacionales. En el 2012, se estrenarán 22", explicó Adelfa Martínez, directora de Cinematografía del ministerio de Cultura colombiano, que precisó que 17 de esos 22 largometrajes ya salieron en las salas de cine del país.
Además, la fuerte presencia del cine de Colombia -uno de los platos fuertes del Festival de Biarritz - se refleja no sólo en el número de películas, sino en la variedad de las temática abordadas, que rehuyen estereotipos, así como en la riqueza de las propuestas estéticas.
"Son películas que reflejan la realidad de Colombia, que es muy rica y diversa, llena de paradojas", señaló Triana. "Cuentan historias de amor, de amistad, con humor, sin olvidar la realidad inmediata", agregó la responsable, destacando además la juventud de los nuevos cineastas.
"Hay un cambio generacional. Son jóvenes que han estudiado cine, que han visto mucho cine. Y que están entendiendo otra manera de abordar el cine, con nuestras historias de todos los días", dijo.
Algunas de las películas, como "La Playa", o "La Sirga", de William Vega, aluden al violento y largo conflicto de ese país, pero de una manera tangencial.
"Es un cine que demuestra calidad, madurez", estimó la responsable.
En el apartado "Foco sobre Colombia", que se inauguró el martes con la película "Los Viajes del viento", de Ciro Guerra, figuran cintas más directamente políticas, como "F.A.R.C", de Juan Felipe Orozco, la historia de un ex guerrillero, Ángel, que entregó las armas y fue amnistiado. Fue entonces cuando una de sus víctimas secuestró a su hija.
Y en el certamen por el premio El Abrazo, tres de los diez largometrajes en competencia son colombianos, entre ellos "Operación E", un thriller político-militar tratado a través de una historia íntima, que lleva a reflexionar sobre las millares de víctimas de ese largo conflicto.
También concursan por ese premio "Sofía y el Terco", ópera prima del colombiano Andrés Burgos Vallejo, protagonizado por Carmen Maura, y la muy aplaudida película que inauguró el festival, que se desarrolla en La Playa, uno de los barrios del centro de la capital de Colombia donde se ha asentado la numerosa comunidad afrocolombiana desplazada a causa del conflicto armado.
Este Festival, que concluye el 30 de septiembre, propone además entre las cintas en competencia "Los salvajes", de Alejandro Fadel; la cubana Juan de los Muertos", de Alejandro Brugués; la peruana "El limpiador", de Adrián Saba; la chilena "No", de Pablo Larraín; "La demora", del uruguayo Alberto Iglesias, y la mexicana "Aquí y Allá", del español Antonio Méndez Esparza.