Un lugar que busca promover el arte en todas sus manifestaciones y que se convertirá en un espacio en donde puedan tener cabida el cine, la literatura, el performance y la música, es a lo que le apuesta Casa Cano.
Desde mañana este nuevo espacio cultural de la ciudad abrirá sus puertas para que los bogotanos disfruten de un lugar en donde se vive y se respira arte. “Cuando mi hija estudiaba arte, ella y sus compañeros comentaban muy frustrados que no tenían dónde exponer sus proyectos, pues los espacios disponibles en la ciudad eran demasiado costosos. Fue así como empezamos a gestar la idea de crear un espacio que pudiera resolver este tipo de necesidades”, afirma Fernando Cano Busquets, uno de los gestores del proyecto.
Casa Cano está ubicada en el tradicional barrio Quinta Camacho de Bogotá, cuenta con un salón grande para exposiciones, dos salas alternas y un amplio salón posterior con jardín. Está previsto que todas las zonas que la conforman puedan utilizarse para diversas actividades y se espera consolidar alianzas con artistas de diversas áreas, empresas públicas y privadas, instituciones y personas apasionadas por el arte.
Para la apertura de Casa Cano, el reconocido artista Gustavo Vejarano trae su exposición “Océanos y Bosques Tropicales”, compuesta por más de treinta piezas entre esculturas y pinturas que reflejan su más reciente etapa creativa.
Sobre esta obra, que será la encargada de darle la bienvenida a Casa Cano, Vejarano afirma que fue gestada en su taller en Taganga: “un día estábamos remando por la bahía y vi unas formas en el agua que aparecían y desaparecían instantáneamente, y eso es dificilísimo de pintar porque no es pintar la onda de luz, es pintar la continua transformación, algo paradójico porque una pintura es una imagen fija, mientras que esto era movimiento y lo que yo quería pintar era lo que sentía cuando lo estaba viendo”, dice.
En cuanto a la escultura, Vejarano comenta “estoy haciendo bosques, mis esculturas son absolutamente figurativas, son cosas que parecen árboles, que parecen hojas y lo que yo pienso es que son la condensación de un bosque y una selva”.
La curaduría de la exposición corrió por cuenta de María Elvira Ardila, curadora del Museo de Arte Moderno de Bogotá. La exposición estará abierta al público desde mañana hasta el 30 de noviembre con entrada libre de lunes a viernes de 10 a.m. a 5 p.m. y sábados de 10 a.m. a 12 a.m.