A raíz de las carencias en cuanto a espacios y medios de difusión artística en Colombia, nace Carma Cobra, una asociación de artistas y diseñadores liderada por los caleños Jean Paul Egred (Pöl), Felipe Bedoya (Doya!) y Armando Mesías (Malo). Cada uno de sus integrantes ostentaba ya una notoria trayectoria en la ilustración y en las artes visuales en general, dominando y empleando diversas técnicas, moviéndose constantemente entre lo digital y lo tradicional.
Al unirse comienzan a desarrollar un mismo concepto en torno a sus tres estilos con el fin de generar siempre una pieza que otorgue un mensaje claro y llamativo. Entre sus diversos proyectos se encuentran la ejecución de murales, exposiciones, conferencias, talleres, capacitaciones, y piezas de concept art para compañas o productos. Aunque se encuentran radicados en Bogotá han contado con constante presencia en Cali y Medellín.
El propósito de cada uno de los proyectos de Carma Cobra es siempre apropiarse de un espacio o realizar un producto artístico que tenga un contexto. Ante todo parten de un concepto o historia acorde al espacio seleccionado con el fin de reconfigurarla memoria colectiva en el lugar.
Es precisamente por eso que su nombre representa una dualidad entre los cuentos urbanos, las leyendas y las creencias populares, reinterpretadas desde una mirada pop y moderna. Dentro de su sello personal está la realización de audiovisuales que complementan su trabajo y generen otra pieza viral de la que las personas se puedan apropiar para interactuar, apreciar y difundir.
“Carma” hace referencia al dogma de las religiones orientales, el equilibrio de energías positivas y negativas. Aunque la manera correcta de escribirlo sería “Karma”, escribirlo con C crea un juego de palabras que en combinación resulta más sonoro y recordable visualmente, mientras que “Cobra” es la representación de lo pop, de la agresividad y lo impactante.
Como ellos lo dicen, lo principal es el mensaje. “Este es el hilo conductor de todas las decisiones: formato, colores, diagramación, sustrato -por nombrar algunos de los elementos más importantes-. Es así como desarrollamos un taller Habláme {sin palabras} que se basa en la capacidad comunicativa de la ilustración, y como ésta depende directamente del mensaje o concepto”.
Otro de los objetivos de este colectivo es generar espacios de diálogo entre los nuevos talentos artísticos para que en ellos se generen nuevas propuestas, las cuales servirán para posicionar y visualizar a los creativos y además para que se le quite al arte ese rótulo elitista y estereotipado que siempre ha tenido. Por esto las exposiciones de estos artistas serán gratuitas, para adquirir nuevos públicos y nuevos puntos de vista.