Los lujosos yates están en el puerto, los grandes hoteles se han engalanado para recibir a cientos de estrellas y se respira ya un aire de fiesta: Cannes, el mítico balneario de la Costa azul francesa, sinónimo de cine y glamour, ponía el martes los últimos toques para la gran cita del cine mundial, que empieza el miércoles.
Una foto en blanco y negro de Paul Newman y su esposa Joanne Woodward, abrazados y besándose, que es el afiche oficial del 66 Festival de Cannes, cuelga del majestuoso Palacio de Festivales, que durante 12 días centrará las miradas de la multimillonaria industria del cine.
En las puertas de ese Palacio hacían fila cientos de periodistas, que buscaban la acreditación para el Festival, que será cubierto por unos 5.000 corresponsales del mundo entero.
El cineasta estadounidense Steven Spielberg, presidente del jurado, se reunirá este martes con su equipo, en el que figuran la estrella australiana Nicole Kidman, el oscarizado taiwanés Ang Lee, director de "La Vida de Pi", el premiado cineasta rumano Cristian Mungiu y los actores Christoph Waltz, de Austria, y Daniel Auteuil, de Francia.
Ese primer encuentro será una oportunidad para el jurado -que deberá ver los 20 filmes que figuran en el concurso oficial-, de descubrir uno de los grandes restaurantes de Cannes, "La Palme d'Or", del hotel Martinez, uno de los grandes palacios de este rico balneario del sur de Francia, que ha alojado en sus suntuosos cuartos frente al Mediterráneo a algunas de las más importantes estrellas de la historia del cine.
El Martinez tendrá estos días un toque de "Los Pájaros", el filme de Alfred Hitchkock, al haber colocado verdaderos halcones en los techos, que tienen como misión no dejar que las palomas sobrevuelen el restaurante al aire libre del hotel.
El chef ha creado para este primer encuentro del jurado un menú especial, del que sólo se sabe que está inspirado en la cinematografía de Spielberg, lo que ha hecho correr la imaginación de algunos periodistas, que especulan que quizá "un tiburón" figurará en el plato de los comensales. O quizá, sugieren, una criatura salida de "Parque Jurásico"
La actriz francesa Andrey Tatou, quien es la maestra de ceremonia de la gala de apertura y clausura del Festival, que cierra el 26 de mayo, llegó ya a Cannes, y se dijo "feliz" de estar gozando de una tarde llena de sol, que según los pronósticos lamentablemente no durará.
En una entrevista con la AFP, la actriz de "El Fabuloso destino de Amelie Poulain" señaló que había vacilado en aceptar el rol de maestra de ceremonias, cuando le fue propuesto por los organizadores del Festival. "Estaba muy tentada, porque el Festival de Cannes es una declaración de amor al cine. Pero también tenía miedo", confesó.
"Pero es una experiencia única, que quiero vivir, intensamente", dijo la actriz, que contó que es ella quien ha escrito el discurso que inaugurará el Festival el miércoles por la noche. "Quería que las palabras fueran mías. Sólo puedo decirles que lo he escrito con el corazón", confió.
Una de las ironías de las que está plagada la historia es que el filme con el que se dio a conocer Tatou, en Francia y en el mundo, "El Fabuloso destino de Amelie Poulain", del realizador francés Philippe Jeunet, fue rechazado por los organizadores del Festival de Cannes, en el 2001.
Cuando se estrenó en salas, esa cinta fue vista por dos millones de personas sólo en las primeras dos semanas y recibió también los aplausos de la crítica.
Otra coincidencia: ese año fue el realizador australiano Baz Luhrmann que abrió el Festival de Cannes, con "Moulin Rouge", una película llena de música, danza, color y plumas.
Este año, el honor de abrir el mayor festival de cine del planeta recae en Tatou y en Luhrmann, que presentará fuera de concurso su adaptación de "El gran Gatsby", que se ha sido vapuleada por parte de la crítica estadounidense pero aplaudida por el público.
La cinta ha recaudado ya 60 millones de dólares en Estados Unidos, donde se estrenó el 10 de mayo.
El Festival de Cannes permitirá al protagonista de ese filme, Leonardo DiCaprio, seguir los pasos del autor de la novela, Francis Scott Fitzgerald, que la escribió en Cap d'Antibes, a 45 minutos de Cannes.
DiCaprio dormirá supuestamente esta noche en un cuarto arrullado por los pinos del Hotel du Cap-Eden-Roc, en cuya playa se bañaba Scott Fitzgerald, que vivió también noches tormentosas regadas por el alcohol en el hotel Carlton de Cannes.
AFP.