Como una gran noticia para el país calificó el Ministerio de Cultura de Colombia la declaración del Camino del Inca como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
"¡Gran noticia para el país! El QhapaqÑan, Sistema Vial Andino, ha sido incluido en la Lista de #PatrimonioMundial de la @UNESCO_es", manifestó el Ministerio en su cuenta de la red social Twitter.
Agregó que las tradiciones del departamento de Nariño (sur), incluido en este camino milenario del Imperio Prehispánico Inca, "son cultura viva del Qhapaq Ñan".
Por su parte, el secretario de Cultura de la ciudad de Pasto (capital de Nariño), Álvaro José Gomezjurado, explicó que esta vía histórica llega a los pueblos de Catambuco, Obonuco y Jongovito, jurisdicción de esa localidad.
"En esas zonas de Pasto existen algunos caminos y vestigios de caminos por los que los incas llegaron y entablaron relaciones comerciales, económicas y culturales con los indios que habitaban la zona", dijo a la AFP Gomezjurado.
El funcionario sostuvo que aunque Colombia tiene el tramo más pequeño del camino, participó activamente en la promoción ante la Unesco del camino del Inca como patrimonio de la humanidad.
"La declaración de la Unesco nos traerá grandes beneficios en cuanto a la integración cultural, económica y diplomática con los otros países que comparten el camino y juntos podremos llevar adelante de forma integrada proyectos de desarrollo cultural", sostuvo Gomezjurado.
El Camino del Inca es una red que atraviesa los Andes de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina, por el que se movilizaban las autoridades, los guerreros y un complejo sistema de postas y mensajeros que se desplazaban a pie.
Los mensajeros del imperio, denominados chasquis, llevaban consigo un código de nudos en una soga, que aún hoy los arqueólogos intentan descifrar.
El Camino del Inca tenía cada 7 km un pukara (puesto fortificado) que servía para control del movimiento de los transeúntes. Y cada 21 km un tambo (posada) para que el Inca y su séquito descansaran y se abasteciesen de comida y agua, según los historiadores.
Además del comercio, las rutas también servían para el rápido desplazamiento de los guerreros en tiempos de combate.