Como medidas drásticas contra el derroche también dejarán de destruir de inmediato los productos no vendidos.
La marca de lujo británica Burberry anunció el jueves haber puesto fin a la práctica consistente en destruir los productos no vendidos al tiempo que confirmó que dejará de utilizar las pieles en sus colecciones.
Burberry afirmó en un comunicado que cesará de destruir ropa y cosméticos con efecto inmediato, tras haber establecido recientemente una estrategia destinada a remediar las causas del derroche.
La marca afirma así estar determinada a proseguir con sus esfuerzos para reutilizar, reparar, dar y reciclar los productos que no se pudieron vender.
En su informe anual de julio, Burberry afirmó haber destruido en 2017 artículos por valor de más de 28 millones de libras (36 millones de dólares, 31 millones de euros), una cifra en fuerte aumento.
Esto equivale a la desaparición de unas 20.000 de las míticas gabardinas de la marca británica.
Tantos los grandes distribuidores como las marcas de lujo acostumbran a destruir sus productos, en lugar de venderlos a precios rebajados, como medida para proteger su propiedad intelectual e impedir las falsificaciones.
"El lujo moderno significa ser responsable socialmente con el medio ambiente. Esta convicción es esencial para Burberry y la clave de nuestro éxito a largo plazo", subrayó Marco Gobbetti, el director general del grupo.
En el mismo comunicado, Burberry confirmó que dejará de utilizar las pieles, en particular en la colección que su nuevo director creativo, el italiano Riccardo Tisci, debe presentar el 17 de septiembre en la Semana de la Moda de Londres.
Esta es una "nueva era", escribió el jueves Tisci en su cuenta Instagram.
La firma precisó también que destruirá progresivamente los productos existentes que contengan pieles.
"¡Victoria!", reaccionó en Twitter la asociación de defensa de los animales PETA. "Tras más de una década de movilizaciones, Burberry prohíbe el uso de pieles y de angora en sus colecciones", se congratuló.
Por su parte, la federación internacional de las pieles expresó su decepción afirmando que "remplazar pieles naturales por materiales plásticos fabricados a partir de petróleo, como las pieles sintéticas, no es de ningún modo ni lujo ni responsabilidad".