El Carnaval de Rio que comenzó prometía ser una vacuna de samba y seducción contra el temor al zika y la recesión, pero la posibilidad de que el virus pueda transmitirse a través de la saliva tiene el potencial de aguar los planes de miles de fiesteros.
En la mayor fiesta a cielo abierto del mundo, donde todos intentan olvidarse los problemas y exudan oscuras fantasías, muchos compiten por quién roba más besos en la boca, una tradición que puede provocar temores en este carnaval.
Científicos detectaron "virus activos con capacidad de infección" del zika en orina y saliva, informó el viernes a periodistas Paulo Gadelha, presidente de uno de los principales institutos de investigación de Brasil, la Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), aunque agregó que no hay aún certeza de que el virus pueda transmitirse por estos fluidos.
"Se precisan una serie de estudios para aclarar esta cuestión", aclaró, y llamó a las mujeres embarazadas a tomar precauciones como no besar a enfermos y no compartir cubiertos ni vasos con nadie.
El zika ha sido vinculado a una explosión de bebés nacidos con microcefalia en Brasil y otros países de Latinoamérica, y también al aumento de síndromes neurológicos como el de Guillain Barré, que provoca parálisis en niños y adultos.
- Besar o no besar -
Cinco millones de personas -un millón de turistas incluidos- ya están sambando, sudando y consumiendo miles de litros de cerveza en 505 "blocos" o grupos de carnaval callejero que desfilan desde hace dos semanas por la ciudad con originales y minúsculos disfraces, aunque el inicio oficial del carnaval fue decretado recién este viernes por el rey Momo.
"Va a haber miedo, sí, pero igual todo el mundo se va a besar como siempre. ¡Creo que deberían haber preservativos de boca!", dijo a la AFP Beatriz de Souza, de 28 años, asidua del carnaval callejero.
Antes del anuncio de la Fiocruz, las autoridades de Rio no se mostraron inquietas.
"La gente está tomando precauciones, (el zika) es algo desconocido pero quien vive aquí en Brasil sabe que el dengue es mucho mas traumático que el virus Zika", dijo el alcalde Eduardo Paes a periodistas al abrir el carnaval.
El zika no ha mermado la cantidad de turistas en carnaval, "la ciudad está llena y la ocupación de hoteles en 90%", aseguró el secretario de Turismo de Rio, Antonio Pedro Figueira de Mello.
"Que las personas se cuiden, se coloquen repelente y salgan a divertirse en este Carnaval. Y en los Juegos Olímpicos el brote será mucho más leve, principalmente porque será invierno en la ciudad y no tendremos una proliferación de mosquitos", añadió.
Como parte del combate al mosquito vector del zika, el famoso Sambódromo que recibirá los lujosos desfiles de las escuelas de samba en las noches del domingo y lunes, fue fumigado.
- Olimpíadas y homenaje a Santos -
En los inmensos y calurosos galpones de la Ciudad de la Samba, en tanto, un ejército de artesanos, bailarines, coreógrafos y voluntarios trabajan como hormigas para dar los aprontes finales a los desfiles de las 12 mejores escuelas.
Todas desfilarán a lo largo de los 700 metros de la avenida Sapucaí del Sambódromo por el título de "campeona de carnaval" ante más de 70.000 espectadores.
Astros del fútbol brasileño como el joven Neymar (23 años), en problemas judiciales por las comisiones e impuestos de su pase al Barcelona, y el mayor futbolista de todos los tiempos, Pelé (75), serán homenajeados el domingo por la escuela Grande Rio, que dedica su 'enredo' o tema del desfile a la ciudad paulista de Santos y a su club de fútbol, que vio nacer a estos ídolos.
Otra escuela, Uniao da Ilha, ha escogido los Juegos Olímpicos que Rio acogerá el 5 de agosto como tema por sugerencia del alcalde: los dioses salen del Olimpo para conocer la 'cidade maravilhosa', se enamoran y deciden quedarse allí para siempre.
El director de la escuela, Marcio André Mehry de Souza, lamenta no obstante la falta de auspicio de Rio-2016 o del gobierno para financiar un desfile que se augura deslustrado en medio de una profunda recesión económica.
"La situación es difícil desde hace cuatro o cinco años. Pero este año ha sido peor porque todo el mundo está en crisis y porque el precio de los materiales aumentó".