por José Arturo Cárdenas
Bolivia redujo 11% su área de cultivos de coca en 2014, de 23.000 a 20.400 hectáreas, un ritmo sostenido en los últimos cuatro años, según un informe de la ONU, mientras el presidente Evo Morales aseguró que la economía de su país ya no está controlada por el narcotráfico.
Antonino de Leo, representante de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC) en La Paz, presentó el informe de monitoreo de reducción de cultivos de coca en Bolivia hasta 2014, una tarea que realiza en los últimos años, tras firmar convenios con el gobierno.
La oficina de la ONU también ratificó en el informe que Bolivia es el tercer productor mundial de esta planta, después de Colombia y Perú. La coca es materia prima para fabricar cocaína.
"En 2014 se confirma una tendencia decreciente en los últimos 4 años, durante los cuales el cultivo de coca disminuyó 10.600 hectáreas, que equivale a más de un tercio de la superficie cultivada de coca entre 2010 y 2014", reveló el funcionario diplomático en un acto al que asistió Morales.
La erradicación en ese período de cuatro años equivale a 14.846 canchas de fútbol, explicó De Leo, quien precisó que "la superficie con cultivos de coca se redujo de 23.000 a 20.400 hectáreas".
Por una ley de la década del 80, Bolivia sólo permite un máximo de 12.000 hectáreas de cultivos de coca para actividades legales, como mascado, infusión y rituales religiosos andinos, aunque el propio mandatario Morales, líder de los cosechadores de coca, reconoció varias veces su deseo de subir la frontera legal a 20.000 hectáreas.
Empero, un estudio del gobierno, financiado por la Unión Europea y difundido en noviembre de 2013, señala que Bolivia sólo necesitaría 14.700 hectáreas para fines legales.
- Narcotráfico y economía -
Morales manifestó su satisfacción por el informe de la UNODC que, según aseguró, certifica los esfuerzos de su gobierno en la reducción de cultivos de coca y en la lucha contra el narcotráfico, una política de Estado, según él.
Destacó que esas acciones se realizan sin el apoyo de Estados Unidos, que hasta 2008 ofrecía asistencia económica y logística a los policías y militares que reducen a mano los plantíos de coca y la lucha antinarcóticos. Ese año la DEA fue expulsada, acusada de brindar apoyo a la derecha local.
"La erradicación o lucha contra el narcotráfico con bases militares, tampoco es la solución, como en algunos países andinos, donde hay bases militares, donde hay funcionarios norteamericanos que operan en la lucha contra el narcotráfico", abundó.
En su discurso incluso mencionó que el éxito es tal que en la actualidad la influencia del circuito coca-economía en la economía de su país es "de menos del 1%", cuando en pasados gobiernos "neoliberales" alcanzó hasta un 14%.
El PIB boliviano se situaba en promedio en unos 5.000 millones de dólares durante la década de los 80, en el apogeo de la producción de droga, mientras que ese indicador macroeconómico trepó en 2014 a 33.000 millones, según datos oficiales.
De Leo, representante de la UNODC en Bolivia, también dio detalles de los decomisos de droga y coca.
En 2014 se decomisaron 582 toneladas de hojas de coca ilegal, 22% más que un año antes, y 4,1 toneladas de clorhidrato de cocaína, un 158% más que en 2013. No obstante, los decomisos de pasta base de cocaína se redujeron de 20 toneladas en 2013 a 18 toneladas el año pasado.
La UNODC también informó que en 2014 se encontraron 214 hectáreas de cultivos de coca en parques nacionales, en el centro del país, prohibido por ley, por lo que debe procederse a su eliminación/AFP.