El sucesivo manejo de los subsidios como elemento fundamental para frenar los paros agrarios que se han presentado en los últimos meses en el país, fue cuestionado por Fedesarrollo.

El director de la entidad, Leonardo Villar, dijo que el tema de los subsidios en el sector agricultor es preocupante, porque todo se concentra en asignar un subsidio para levantar un paro, lo que conduce al paro del sector adjunto.

“A mí me preocupa la racha de paros y la forma en que se estimulan, por la forma en que se han venido asignando esos subsidios. Viene un sector tras levantar un paro, se le asigna un subsidio, lo que conduce al siguiente paro del sector de adjunto”, indicó.

Villar sostuvo que ante este hecho cuestiona si tales subsidios a largo plazo tienen un efecto positivo, “creo que es un tema que hay que revisar con mucho cuidado para no generar un dependencia con los agrícolas y los subsidios”. 

De otra parte, frente a los resultados sobre todo en el sector agrario del Tratado de Libre Comercio (TLC) con los Estados Unidos al cumplirse un año de entrar en operación, el director de Fedesarrollo dijo que ha sido positivo por la estabilidad que le ha dado a la relación comercial entre los dos países, pero dijo que aún es muy temprano para hacer un balance en materia de números.
Villar dijo a Caracol Radio que con este tratado bilateral hubo expectativas exageradas de lado y lado, entre quienes temían que iba a acabarse el país y entre quienes creían que iba a ser el disparador de la economía. Pero ninguna de las cosas fue así, es algo que necesita más tiempo, señaló.

El destacado economista sostuvo que el TLC tiene elementos importantes que aún no se sienten, como el impacto de darle estabilidad a las reglas del juego. El TLC garantiza que las ventajas arancelarias se mantienen y no necesitan renovación año a año como sucedía con el Aptdea. 

Añadió que el tratado estimula la información y el crecimiento del comercio, pero los resultados se podrán evaluar en pespectiva, en varios años.

Dijo, de otro lado, que es optimista del futuro de la economía del país: "tengo la esperanza de que los resultados de la encuesta de opinión al consumidor esté marcando un punto de quiebre, con respecto a los resultados económicos de los tres últimos trimestres que han sido pobres", señaló.

Manifestó que confía en que en lo que resta del año el país tenga más dinamismo con crecimientos por el orden del 4% o mayores.

De otro lado, el ministro de Comercio, Sergio Díaz-Granados, aceptó que ha sido un “arranque suave” el primer año del Tratado.

Sin embargo, dijo que hay empresas que están empezando a sembrar negocios en un mercado que era poco conocido.

Al hablar de los productos que han salido beneficiados, en diálogo con Blu Radio el ministro mencionó algunas frutas y el pescado freso.

Según él, esos dos productos principalmente empiezan a ser apetecidos por algunas compañías estadounidenses.

Y aunque si se mira el total de las exportaciones no se puede apreciar un beneficio pleno en este primer año del acuerdo bilateral, Díaz-Granados dijo que ahora hay “más productos exportados y más empresas participando”.

“Hay empresas que por primera vez han logrado ubicar sus productos en ese mercado porque hay que tener en cuenta que aunque el carbón es el producto hegemónico, el TLC no se pensó en éste sino en diversificar la llegada de nuestros productos a Estados Unidos”, señaló.