No hace mucho, el 22 de enero, la prensa italiana especulaba con que Juan Guillermo Cuadrado se iría de Juventus porque el técnico Massimiliano Allegri no estaba muy contento con su rendimiento, pero como dicen los futbolistas, “cada partido es una revancha” y el volante hoy es uno de los jugadores determinantes del equipo y tiene a la afición “en el bolsillo”.

Ha marcado goles decisivos y ha sido declarado figura en los últimos encuentros disputados por la vecchia signora, hoy flamante líder de la Serie A de la Liga italiana.

Pero lo más importante no es eso, sino que desde su llegada a la Juve se le ha ido notando un cambio que lo hace un jugador más sobresaliente, no por su brillo individual, sino por su rendimiento para el equipo.

Cuadrado no ha perdido su esencia. No. Continúa siendo el habilidoso, pícaro, gambeteador y mantiene intacto su gusto por ir siempre hacia adelante en busca del arco contrario, pero con unos aditamentos adicionales que lo hace un jugador más completo.

Cuando apareció en el Medellín marcaba poco, se iba al ataque y se le olvidaba regresar. Esas características las conservó a su paso por Udinese, Lecce, Fiorentina en Italia y Chelsea en Inglaterra, y aun a su regreso al calcio. Tal vez por ello a pesar de buenas presentaciones perdió la titularidad y Allegri empezó a llevarlo como suplente y a ponerlo sólo en la Copa de Italia.

Pero la calidad, inteligencia y malicia de Cuadrado no se podía perder y a pesar de lo que publicó el 22 de enero de este año Tuttosport: “Cuadrado se aleja de la Juventus. El colombiano aún no ha podido ponerse en forma y no es el mismo jugador que se admiraba cuando estaba en la Fiorentina. Difícilmente Juventus invertirá los 20 o 25 millones para quedarse con su pase”, hoy es un jugador que marca diferencia.

Y no solo la Juve está ganando con el cambio o, mejor con los progresos del volante nacional, sino que si llega en ese nivel a la Selección, ganará el técnico Pekerman y James Rodríguez porque tendrá el socio ideal para volver a ese fútbol de toque que maravilló al mundo en la Copa de Brasil 2014.

Cambio

El Cuadrado de hoy, bajo la batuta de Allegri, es un jugador distinto. Sí. ¿Qué tiene de diferente? Que es un jugador disciplinado tácticamente, que cumple tareas en la cancha, que antes que el lucimiento personal pone al servicio del equipo su capacidad para marcar, para llevar el balón, para rematar al arco.

Del banco pasó a la titular en los últimos tres partidos de Liga, más los de Copa, acumulando elogios de sus compañeros, de la prensa y ahora ya no se habla de su partida, sino de la forma para retenerlo.

Frente al hasta el sábado líder Nápoles, Cuadrado fue inicialista y tuvo un gran primer tiempo y aunque bajó en la segunda mitad su rendimiento, el técnico Allegri lo mantuvo en la cancha por una sencilla razón, es un jugador desequilibrante y una genialidad suya puede resolver un partido.

Esta vez no convirtió el gol de la victoria, pero hizo su aporte y la ‘vecchia signora’ le arrebató el liderato a su rival, aparte de que sumó 15 triunfos de manera consecutiva.

El mediocampista colombiano fue de los más destacados porque mostró su velocidad y talento a la hora de atacar, y realizó además una buena tarea defensiva, taponando el sector izquierdo de los napolitanos.

“Cada vez que tenía el balón, Juan Guillermo estuvo fresco para gambetear y serio en la entrega del esférico a sus compañeros. Como le ha pedido el técnico Massimiliano Allegri, el número ‘16’ ya no se ‘engolosina’ con la pelota, sino que juega serio y en equipo”, señaló la crítica italiana del colombiano.

Y agregó que “el nacido en Necoclí (Antioquia) se movió en varias ocasiones por todo el frente de ataque, exigiendo a la férrea defensa visitante. A pesar del 0-0 en la etapa inicial, el colombiano fue de lo mejor del compromiso”.

En la segunda mitad Cuadrado pasó a realizar una labor táctica, en la que cumplió. Su nivel sigue en aumento y la confianza de su entrenador es muestra de ello.

Pero además un histórico, Fabio Cannavaro, ganador del Balón de Oro en el 2006, no dudó en afirmar que, actualmente, la Juve cuenta con un “Cuadrado decisivo”.

Para Cannavaro y la prensa italiana, Cuadrado “es uno de esos puntos clave de la vecchia signora, a quien no se cansan de elogiar por su incidencia en el equipo en las últimas jornadas”.

“El colombiano puede cambiar en un instante la acción porque es más rápido que todos y está en gran forma. Es definitivo en el contraataque”, dijo Cannavaro.

“La organizada defensa de Nápoles evitó que Dybala y Morata tuvieran opciones dentro del área. Fue por eso que los espacios se le abrieron al exjugador del Chelsea (Cuadrado). Goulam sufrió con Cuadrado y Koulibaly recurrió a la falta para detener al escurridizo colombiano. Al 16 se le vio suelto, con confianza”, indicó la prensa tras el partido del sábado.

“Dentro del planteamiento, era indispensable que los volantes externos bajaran a marcar. Cuadrado acató a la perfección las instrucciones. Cuando Juventus perdía la pelota, el colombiano siempre regresó para taparle la salida a Insigne, jugador clave en Nápoles”, agregaron.