Tras haber eliminado prácticamente él solo a la Suecia de Ibrahimovic, ofreciendo a Portugal su billete para el Mundial de Brasil-2014, Cristiano Ronaldo es más que nunca la gran esperanza de su país para alcanzar nuevos logros.

Autor del gol que dio la victoria a la 'Selecçao' en Lisboa en la ida de la repesca (1-0), 'CR7' noqueó a Suecia con un 'triplete' antológico, que volvió inútil el doblete de 'Ibra', a la vuelta, el martes en el estadio de Solna (suburbios de Estocolmo).

Después de protagonizar una floja campaña en las eliminatorias, Portugal tuvo que ir a la repesa, como ya le ocurrió para el anterior Mundial, el de Sudáfrica-2010, y para la Euro-2012.

Una vez más, la instancia extrema sonrió a los portugueses, muy irregulares en el Grupo F europeo, lo que permitió a Rusia clasificar de manera directa, con un punto más en su haber.

Tanto en la campaña de clasificación como en la repesca ante Suecia, "demostramos que jugamos mejor bajo presión que cuando estamos en una posición confortable", explicó el entrenador Paulo Bento, quien se manifiesta privilegiado por contar con un jugador como Ronaldo en su efectivo.

Con los cuatro goles anotados a Suecia, el capitán luso igualó el récord de 47 tantos en selección que poseía Pedro Pauleta. El "rey" Eusebio, leyenda viva de los años sesenta logró anotar 41 en 64 partidos con la 'Selecçao'.

"Los records están hechos para ser batidos. No es mi prioridad batir el de Pauleta, aunque sé que lo haré naturalmente", señaló el delantero estrella del Real Madrid.

A los 28 años de edad, Cristiano Ronaldo ha jugado 109 partidos en el equipo nacional y el tiempo seguramente le permitirá batir también otro récord, el de 127 encuentros de Luis Figo, quien se retiró en 2006 con casi 34 años de edad.

Finalizada la época de la 'generación de oro' del balompié luso, liderada precisamente por Figo, antecesor de Cristiano Ronaldo como capitán, durante mucho tiempo una duda crucial era si el Balón de Oro de 2008 sería capaz de conservar el estatuto logrado por sus mayores.

No obstante, el delantero nacido en el archipiélago de Madeira ha dado pruebas desde sus comienzos como internacional, hace ya diez años, con aquella final de la Euro-2004 perdida ante Grecia.

Olvidados de las imágenes de aquel muy joven Cristiano Ronaldo bañado en lágrimas, el pueblo luso puede festejar por todo lo alto a su 'héroe', puesto que la 'Selecçao' disputará en Brasil su octavo gran torneo consecutivo, aunque sólo el duodécimo de toda su historia.

Después del desempeño brillante ante Suecia, sus detractores lo tendrán muy difícil para afirmar que no es digno del próximo Balón de Oro.

Tras los comentarios algo burlones del presidente de la FIFA, Joseph Blatter, quien dijo preferir el estilo del argentino Lionel Messi que el tipo "comando" de Ronaldo, el luso "le respondió en el campo de juego".

"Sabía que Portugal me necesitaba en estos dos partidos, y dije presente", resumió 'CR7'. En Brasil también deberá contar con él.