Creciente llegada de menores ilegales a EU, gobierno en alerta | El Nuevo Siglo
Jueves, 12 de Junio de 2014

La creciente llegada de menores de edad que entran ilegalmente a Estados Unidos ha puesto en alerta al gobierno en ese país, que dispuso una amplia gama de recursos para atenderlos en albergues e intentar detener el fenómeno.

El secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson señaló este jueves que los servicios fronterizos y de inmigración están a "capacidad completa" para atender a los niños.

A la vez, aviones de la Guardia Costera y de la agencia de inmigración ICE son usados para transportar a los menores a albergues -incluyendo tres bases militares cedidas por el Departamento de Defensa-, mientras el Departamento de Justicia actúa acelerando los trámites de deportación.

Johnson, a la cabeza de un grupo intergubernamental para atender la coyuntura, anunció también que viajará en julio a Guatemala para buscar maneras de contener el flujo de menores.

Tres de cada cuatro menores hallados en la zona fronteriza de Estados Unidos provienen de El Salvador, Honduras y Guatemala, según el gobierno estadounidense.

- "Contener la marea" -

En los últimos meses, el número de niños indocumentados inundó la frontera del suroeste de Estados Unidos.

Del 1 de octubre de 2012 al 30 de septiembre de 2013 fueron identificados 24.493 menores de edad que ingresaron clandestinamente sin la compañía de un adulto.

Pero en los ocho meses siguientes, la cifra se duplicó a más de 47.000 niños, un fenómeno que el presidente Barack Obama e influyentes legisladores han calificado de crisis humanitaria.

Y según el subsecretario para Niños y Familias, Mark Greenberg, esa cifra podría llegar a 60.000 este año.

"Sabemos que debemos hacer algo para contener esta marea", señaló Johnson.

El secretario dijo que conversó con los embajadores de esos países, y de México, sobre su "interés compartido en seguridad fronteriza y para acelerar las repatriaciones".

Las autoridades de Honduras reaccionaron alarmadas este jueves porque "más de 60.000 menores" de ese país permanecen detenidos en albergues en Estados Unidos.

Por su parte, el presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, prometió perseguir a los traficantes de indocumentados, que reciben dinero de familiares de los niños para trasladarlos vía terrestre hasta Estados Unidos.

Uno 337 menores salvadoreños se encuentran en un refugio en Nogales, Arizona, (suroeste de EEUU), según el ministerio de Relaciones Exteriores.

El fenómeno, que se ha incrementado consistentemente en los últimos años, también ha ocupado a las autoridades mexicanas que en 2013 deportaron a 8.577 menores, principalmente centroamericanos. En 2012, la cifra fue de 5.966.

- "Prioritarios" para ser deportados -

Los niños realizan el extenuante viaje de cientos de kilómetros a través de México para escapar de las pésimas condiciones económicas y a la violencia en sus países, y también por el deseo de reunirse con familiares en Estados Unidos, donde algunos tienen la esperanza de permanecer legalmente.

Pero Johnson subrayó que los niños que han cruzado la frontera en los últimos meses no obtendrán estatus legal o ciudadanía, y que en cambio son considerados "prioritarios" para ser deportados.

"No promuevo en ninguna forma o manera la inmigración ilegal. Ese es el mensaje", dijo Johnson, que ordenó renovar una campaña de relaciones públicas en español e inglés sobre los peligros de enviar a niños a cruzar la frontera y ordenó reforzar las medidas contra las bandas de traficantes.

Según Greenberg, su agencia ya venía ampliando la capacidad para atender el aumento de inmigrantes indocumentados, pero se vio sorprendida en los últimos meses.

"Las cifras, particularmente desde comienzos de mayo, aumentaron a un ritmo más allá de lo que habíamos pronosticado", señaló.

En las instalaciones, los niños son alimentados, reciben atención médica -incluso mental- y realizan actividades físicas, indicó el funcionario.

Los menores son luego entregados a familiares o cuidadores de confianza, pero el proceso para deportarlos sigue en curso, explicó.