Costo político no frena Valorización II en Barranquilla | El Nuevo Siglo
Martes, 4 de Septiembre de 2012

El cobro de la Valorización II para adelantar una serie de obras en Barranquilla sería el responsable del desplome en la favorabilidad de la alcaldesa Elsa Noguera de 60% a 41%, según una encuesta que para agosto adelantó la firma Gallup.

 

Con este gravamen la Administración que se posesionó el pasado 1 de enero busca un recaudo de $379.000 millones este año para financiar varias obras previstas en el Plan de Desarrollo.

 

Noguera también parece creer que el cobro de la Valorización II es ‘culpable’ de la baja en su aceptación por parte de la ciudadanía.

 

“Estamos haciendo la tarea, aunque nos toque asumir el costo político del programa de Valorización”, dijo, y añadió que las obras previstas son necesarias para mejorar la calidad de vida de los habitantes de esta capital. “Dentro de pocos años todos se darán cuenta que las obras sí eran necesarias para Barranquilla”, concluyó la Mandataria.

 

“La Administración Distrital continuará con las obras de Valorización porque es progreso para Barranquilla, tenemos que avanzar en obras que mejoren la conectividad, pero también que nos permitan organizar nuestro comercio informal, recuperar nuestro hermoso Centro Histórico, Barranquillita y el río Magdalena, todo con un solo propósito: que llegue mucha inversión a Barranquilla, que la ciudad sea competitiva, que seamos capital del TLC para que tengamos más oportunidades para todos”, expresó la Alcaldesa.

 

Sin embargo, al inconformismo de una parte de la ciudadanía por este cobro en medio de la apretada situación económica que se vive, se suma el Frente Amplio Cívico por el Rescate de Barranquilla, el cual asegura que el cobro está edificado sobre unos acuerdos (006 de 2004 y 010 de 2008 ) que son inconstitucionales.

 

En ese sentido el arquitecto Orlando Manjarrés, integrante del Frente Amplio, manifestó que “esperamos que la Alcaldesa recapacite, sea sensata, detenga el cobro de la Valorización y convoque una mesa de concertación donde se escuchen a todos los sectores”.