Corea del Norte habría fallado por segunda vez en dos semanas en lanzar un misil de medio alcance, coincidiendo con los preprativos del congreso del partido único, en el poder desde hace casi 40 años.
Según un responsable del ministerio surcoreano de Defensa, Pyongyang lanzó lo que parece ser un misil Musudan hacia las 06H40 (21H40 GMT del miércoles) desde Wonsan, en la costa oriental, pero el aparato desapareció rápidamente de los radares.
"Cayó unos segundos después de su lanzamiento por lo que parece que fue un fracaso", dijo la fuente a la AFP.
El 15 de de abril, cumpleaños del fundador del régimen Kim Il-Sung, Corea del Norte ya registró un revés al probar un misil Musudan que, con un alcance de entre 2.500 y 4.000 kilómetros, podría alcanzar Corea del Sur, Japón y las bases estadounidenses de la isla de Guam, en el Pacífico.
Estos fracasos se produjeron mientras Corea del Norte prepara un congreso de partido único en el poder, el primero desde 1980, que se celebrará a partir del 6 de mayo.
Se espera que el dirigente norcoraeano Kim Jong-Un aproveche este acontecimiento para confirmar su poder como líder supremo y poner en relieve los éxitos de su país en su programa nuclear y balístico.
Los observadores temen que Pyongyang lleve a cabo un quinto ensayo nuclear en esas fechas, después del que realizó el 6 de enero.
Corea del Norte ha reivindicado en los últimos meses una serie de avances técnicos hacia lo que parece ser el objetivo último de su programa nuclear: la puesta a punto de un misil balístico intercontinental (ICBM) equipado con una cabeza nuclear capaz de impactar en el continente americano.
- Progresos peligrosos -
El sábado, Corea del Norte ensayó con éxito un misil balístico submarino (SLBM), una operación muy criticada por el Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas, que prohíbe a Pyongyang cualquier programa nuclear o balístico.
"El gobierno condena este nuevo disparo de misil balísitco (...) que viola claramente las resoluciones de la ONU y es un acto de provocación", declaró el ministerio de Relaciones Exteriores surcoreano. Seúl trabajará con otros miembros de la ONU para "tratar de infligir nuevas sanciones al régimen".
El pasado fin de semana, el presidente estadounidense Barack Obama consideró que Corea del Norte estaba haciendo progresos peligrosos aunque sus esfuerzos no condujeran a éxitos claros.
"A pesar de que, la mayoría del tiempo, fracasen en numerosos ensayos, van acumulando conocimientos", dijo. "Nos tomamos esto muy en serio, igual que nuestros aliados y todo el mundo", declaró.
La tensión en la península coreana no deja de crecer. Tras el ensayo nuclear de enero y el lanzamiento de un cohete en febrero, la ONU impuso a Pyongyang duras sanciones, incluyendo la limitación en las exportaciones de carbón y de hierro. En respuesta, Corea del Norte ha multiplicado sus amenazas contra Seúl y Estados Unidos.