Una misión humanitaria encabezada por la Defensoría Regional de Córdoba visitó a dos niños de 14 y 15 años, heridos como consecuencia de la activación de un artefacto explosivo en la vereda Altamira del municipio de Tierralta.
Los funcionarios de la Defensoría acudieron al Hospital San Jerónimo de Montería, a donde fueron remitidos los estudiantes de octavo grado en la Institución Educativa Crucito, y que se dirigían a su residencia al momento del incidente.
Aunque las versiones iniciales apuntaban a que el animal sobre el cual se desplazaban los jóvenes habría pisado una mina antipersonal sembrada por presuntos miembros de la guerrilla, cuyos frentes 18 y 58 tienen presencia en el área, en las últimas horas la Defensoría Regional recibió otros testimonios según los cuales personal de la Fuerza Pública estaría realizando un ejercicio de entrenamiento en el marco del cual habría sido arrojado el artefacto que alcanzó a los estudiantes.
Por eso, además de verificar la situación médica de las víctimas, tomar las declaraciones e informar a sus familiares sobre la ruta que deben seguir para obtener la asistencia del caso, la Defensoría del Pueblo solicitó al Comando de la Undécima Brigada del Ejército y a la Fiscalía Seccional de Córdoba adelantar las investigaciones correspondientes a fin de esclarecer estos lamentables hechos.