Las protestas que llevan a cabo campesinos colombianos complicaron este miércoles el acceso a Bogotá por el bloqueo de vías, mientras dirigentes de la movilización rechazaron la convocatoria del gobierno a una mesa de diálogo.

La protesta de carácter indefinido busca que se fijen precios de sustentación para ciertos productos, así como la rebaja de los insumos agrícolas.

Además, los pequeños agricultores buscan garantías para el acceso a la propiedad de la tierra, la constitución de zonas de reserva campesinas, una política favorable a los mineros artesanales y mejoras en las zonas agrícolas, especialmente en cuanto a salud y acceso al agua potable.

Según el Instituto Nacional de Vías, los problemas de movilidad se presentan en 16 zonas del país, incluida la capital, con 19 carreteras cerradas.

Además, ha habido enfrentamientos en varios puntos que dejan 82 policías y un número indeterminado de manifestantes lesionados, así como 98 detenidos, según el director de la Policía, Rodolfo Palomino.

El acceso a Bogotá desde la rica región agropecuaria de Boyacá (centro) fue interrumpido por tercer día consecutivo, y se reportó también el cierre temporal de la carretera que conduce al departamento de Meta (este), confirmaron testigos a la AFP.

Ambas regiones conforman la despensa agrícola de Bogotá, de 7,3 millones de habitantes.

"Los buses no pueden pasar y bajan a la gente en medio del camino. Les tiran piedras y han puesto tachuelas en la vía. Llegamos de milagro", dijo Diana Martínez, un ama de casa de 45 años quien junto con su familia regresaba de la ciudad de Tunja, capital de Boyacá.

En la terminal de transporte de Bogotá se ha dejado de vender boletos para esas dos zonas.

Desde Boyacá tampoco hay paso para los vehículos que transportan alimentos, luego de que unos 40.000 camioneros en todo el país se unieran el martes a la protesta, en demanda de una rebaja de los precios de los combustibles.

"No pasan los alimentos, no está pasando papa ni tampoco leche. En total hay unos 200.000 camiones parados en todo el país, unos voluntariamente y otros por los bloqueos", dijo a la AFP Eberto Díaz, portavoz de la Mesa Nacional de Interlocución Agraria, que organiza la protesta.

"El paro se mantiene y se está robusteciendo", aseguró el dirigente, que estimó en unos 200.000 los campesinos que manifiestan.

En tanto, el ministro del Interior, Fernando Carrillo, planteó un diálogo a los agricultores.

"Estamos convocando para mañana (jueves), siempre y cuando suspendan las vías de hecho y el ejercicio de la violencia, a los que quieran concurrir a una mesa de diálogo en Boyacá", dijo.

Pero Díaz rechazó el llamado aduciendo que el gobierno "trata de forjar diálogos regionales", en tanto que los campesinos exigen una mesa nacional para solucionar la crisis estructural del campo.

"Ya ha habido muchos acuerdos departamentales que no se cumplen. No estamos interesados en mesas departamentales sino en una mesa nacional", sostuvo.

En una de las refriegas en la vía a Villavicencio, cuatro policías fueron retenidos este miércoles por manifestantes, quienes los liberaron horas después con la mediación de la Defensoría del Pueblo.

También este miércoles se registraron disturbios en universidades públicas de Bogotá, donde encapuchados se enfrentaron con la Policía lanzando piedras y bombas de estruendo.

El gobierno del presidente Juan Manuel Santos ha reiterado su disposición al diálogo, pero remarca que antes deben cesar los cortes de rutas.

"Este es un gobierno que dialoga, receptivo, que está escuchando al país y a sus necesidades, que hace enormes esfuerzos por atenderlas. Pero es un gobierno que tiene cero tolerancia frente a las vías de hecho", declaró el miércoles el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.

Unos 15.000 agentes han sido desplegados en todo el país para controlar las decenas de manifestaciones y actos de protesta. Sin embargo, la Policía no ha ofrecido este miércoles un reporte oficial de la situación ./AFP