División en la opinión pública causo la propuesta del alcalde electo Gustavo Petro de instalar peajes urbanos en sectores congestionados de la capital para mejorar la movilidad en sitios como el centro histórico o Chapinero.

Es importante recordar que ahora que se arma la controversia, en la campaña Petro anunció y defendió los peajes urbanos. En el plan de gobierno “Bogotá Humana Ya!”, el alcalde electo indicó que “eliminaré gradualmente el Pico y Placa para reemplazarlo por un modelo de administración de zonas de congestión. El Pico y Placa no mejoró la eficiencia del sistema público de transporte, por el contrario, propició la mayor demanda de vehículos particulares y la congestión, demostrando que es un mecanismo ineficaz para resolver los problemas de movilidad. Me propongo organizar y administrar zonas de congestión en el acceso a zonas específicas de la ciudad, con alternativas de parqueadero, transporte público y peajes urbanos”.

En este sentido, los conductores de vehículos particulares tienen opiniones dividas frente a los peajes urbanos: unos consideraron que era una buena alternativa precisamente para descongestionar a la capital del país y otros manifestaron que no era justo por los impuestos que pagan.

Mientras se tiene presupuestado que esos recursos sean invertidos en el subsidio de transporte, los ciudadanos esperan que con los dineros recaudados mejore el transporte público o se diseñan medidas eficientes como el metro o tranvía por la ciudad.
El concejal Carlos Fernando Galán, presidente de Cambio Radical, dijo que la propuesta es inoportuna para la capital del país.

Aunque para Galán, la gran congestión que padece diariamente Bogotá obliga a buscar opciones como esta, que permita descongestionar la ciudad y generar recursos para subsidiar el transporte público, dijo que en la capital no se cuenta con un sistema de transporte que de cobertura a la demanda del servicio que tendría la ciudad.
El ex alcalde Enrique Peñalosa, el Partido Verde, dijo que hay que cobrar por el uso del carro, pero dijo que si la propuesta del electo Alcalde de Bogotá se destina a la administración de los peajes no tiene mayor sentido.

En contra propuesta, dice que se debe subir la sobretasa a la gasolina: “Lo lógico sería subirla al 60 por ciento para tener más recursos para construir las vías que se necesitan y tener un mejor sistema de transporte”.
La ex senadora Gina Parody dijo que lo que hay que hacer en Bogotá son autopistas urbanas y no peajes en las calles.

Parody declaró que Petro cometería un error muy grande “si lo que hace es cerrar el centro y cobrarle a la gente por congestión o simplemente a la gente en cualquier calle le va a cobrar por congestión”.

Para ella, la medida que Petro tiene en mente es técnica, pero a su juicio no es pertinente para una ciudad como Bogotá. “Lo que se les olvida a los economista que lo están asesorando a él es que en Bogotá los carros han aumentado tres veces en los últimos años y la malla vial no ha aumentado para nada”.