Una fuerte polémica quedó planteada ayer luego de que se supiera este fin de semana que la Superintendencia de Puertos y Transporte sometería a Transmilenio a un control especial durante seis meses.
La Superintendencia, después de verificar técnicamente los problemas que causa tener dos tarjetas para Transmilenio y el Sistema Integrado de Transporte Público (Sitp), hizo un llamado de atención a la Administración para crear una sola tarjeta para cancelar los pasajes.
De inmediato, el alcalde mayor Gustavo Petro tuiteó preguntándose “¿por qué cuando en Transmilenio-IDU se robaban el dinero de los bogotanos no hubo acción de la Superintendencia sobre él y ahora sí?”.
“¿Por qué cuando la corrupción aletargaba las obras de la 26 y la 10, no hubo control de superintendencia y ahora que las terminamos sí?”, volvió a preguntarse el burgomaestre.
El Alcalde precisó que “responderemos conforme a la ley”, es decir, sometiéndose al dictamen de la Superintendencia, pero consideró necesario expresar las inquietudes porque “es grave lo que se pone en juego en Transmilenio”.
Distrito y Nación
Tras pronunciarse sobre ese tema específico, Petro señaló que “he querido que a diferencia de los 8 años anteriores Nación y Distrito se acerquen en bien de la sociedad”; consideró que “a pesar de diferencias ideológicas, de visión del mundo, se pueden construir proyectos comunes, acordar el presente y el futuro”.
Sin embargo, se lamentó de que “entre más intento acercar el Distrito y la Nación, más funcionarios aparecen tratando de destruir esas relaciones”, que “entre más esfuerzos, más se deterioran las relaciones. Más intentos de detener programas y deteriorar la imagen del Distrito aparecen”.
Así, Petro señaló que “sucesos que se desarrollan alrededor de corredores férreos, San Juan de Dios, Transmilenio, Familias en acción, vivienda, no son positivos”.
“La ciudad vivió una etapa donde la corrupción frenó su desarrollo. Ahora no puede vivir la etapa donde el cálculo político frena el desarrollo”, manifestó Petro, para agregar que “de nuestra parte estaremos listos a una relación fluida, amistosa y eficaz entre Nación y Distrito. Pero defenderemos el interés de la Ciudad. Si para el logro de proyectos comunes hay que ceder en protagonismos y egos, no tenemos ningún problema en hacerlo”.
Bajar homicidios
En medio de todo, este fin de semana pareció ratificarse que hay mejor comunicación directa entre Petro y el presidente Juan Manuel Santos que entre el Distrito y algunos funcionarios de la Nación.
El sábado, Santos dijo: “Le mando ese mensaje al alcalde Petro: trabajemos juntos; esta Policía es capaz, la ciudadanía, los bogotanos, son capaces”.
Santos, al activar la Unipol, había dicho que “si nos proponemos, podemos entregar a Bogotá con un dígito en materia de homicidios por cada 100.000 habitantes. Les pongo ese reto, estoy seguro que lo podemos cumplir”.
En respuesta, Petro tuiteó que “la reducción de la tasa de homicidios en Bogotá a un dígito por cada 100.000 habitantes produce una alianza nacional y local alrededor de la vida”.
Santos también destacó que el cumplimiento de metas nacionales como la reducción de la pobreza extrema y la disminución de la tasa de desempleo a un solo dígito,nos permite ser optimistas frente a la reducción de la tasa de homicidios en la capital.
“Porque como vamos progresando en los diferentes indicadores, eso me llena de optimismo, llena al país de optimismo de cada día obtendremos más seguridad”, reiteró.
El presidente Santos puso de relieve la caída del 24 por ciento en materia de homicidios con arma de fuego en Bogotá, que pasaron de 1.262 en septiembre de 2011 a 957 este año.
El secretario Distrital de Gobierno, Guillermo Asprilla, aseguró que en los últimos nueve meses en la capital del país la tasa de homicidios bajó seis puntos. "A comienzos de este año la tasa era de 22,5 hoy es de 16,1 homicidios por cada cien mil habitantes", señaló.
El funcionario manifestó que es posible reducir a un dígito la cifra de asesinatos y que esa es la meta de la Administración de la Bogotá Humana.
Afirmó que en Bogotá hay microterritorios de inseguridad en las localidades de Suba, Kennedy, Rafael Uribe Uribe y Ciudad Bolívar. "Allá vamos a intervenir con un programa llamado Territorios de Vida y Paz, que busca una atención integral a los factores que rodean lo relativo a la seguridad”.
La estrategia busca focalizar en estos cinco territorios la intervención de todas las autoridades distritales, para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de esos sectores de la ciudad.