Las diferencias entre el Gobierno Nacional y los empresarios del sector textil y de calzado se acentúan cada vez más, al manifestar cada uno sus inconformidades sobre el alza en los aranceles para los productos de estos dos sectores.

La última reacción se vio ayer por parte del ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, al argumentar que el Ejecutivo lo que pretende es proteger a los empresarios de la revaluación, defendiendo así las medidas tomadas por parte del Ejecutivo.

“El propósito es defender a estos sectores de una eventual competencia desleal de otros países, por eso ya he hablado con algunos comerciantes y ellos tienen esa preocupación. Acordamos una reunión para escucharlos, es un sector que genera mucho empleo”.

En diálogo con algunos medios, el jefe de la cartera ministerial aclaró que la inquietud se presenta porque China decidió mantener “su economía dinámica con un ritmo del 8% de crecimiento anual”, lo que traduce que se hayan bajado los precios en las exportaciones.

“Las apoyan muchas veces con subsidios a la finca raíz, a los servicios públicos e incluso con salarios bajos”, comentó Cárdenas al exponer que se pretende que el estímulo a las importaciones chinas “no sean competencia desleal para nuestros empresarios".

Amenazas

Por ello, hizo énfasis en que el mercado nacional se vea amenazado, “tendremos que tomar medidas y eso fue lo que hicimos con textiles y calzados”.

Sin embargo, varios empresarios adujeron no estar de acuerdo con las apreciaciones del Ministro puesto que en otras ocasiones se les han entregado las mismas declaraciones sin una solución concreta.

Así lo reiteraron recientemente  los presidentes y directores de varias empresas como Arturo Calle, Spring Step, GAP, Permoda, Cencosud, y Santorini  al insistir en que en realidad las medidas del Gobierno agravan los problemas del libre comercio, especialmente en la confianza inversionista y la estabilidad jurídica.

Como lo registraron algunos medios, Arturo Calle, dueño de la marca que lleva su mismo nombre, consideró que “este proyecto se nos va a ir atrás con una pérdida grande”, refiriéndose a los planes de expansión de la compañía.

Para Calle, si el Estado colombiano “me dice que se acabó el combustible, yo me dedico a la dolce vitta, y fuera de eso me vuelvo rentista, pero esa no es mi misión porque yo quiero el país donde nací y que me ha apoyado”.

Opinión similar es la del gerente General de Spring Step, José Fernando Riaño, quien cree que la decisión de subir el precio de los aranceles le afectará directamente en las ventas.

Implicaciones

“Esto implicará trasladar entre 10 mil y 30 mil pesos a todos los zapatos traídos de oriente”, dijo.

Sus reclamos incluyeron que no cuentan con planes de contingencia para la entrada en vigencia del decreto que será el 1° de marzo próximo. “Todos tenemos importaciones en zonas francas y ahí tenemos unas zonas grises que no sabemos cómo aplicarlo. No es que nosotros queramos comprar a productores locales, es que la moda está globalizada e internacionalizada, y eso es lo que nos piden en nuestras tiendas, y no lo conseguimos en la producción nacional en la cantidad necesaria”.

El decreto en cuestión es el 074, que modifica parcialmente el arancel de aduana al fijar un sobrearancel al calzado y textil traídos especialmente de China.

Para la Federación Nacional de Comerciantes, en cabeza de Guillermo Botero como su presidente, la norma perjudica a la industria  pues “el Gobierno lo que debe es buscar herramientas para que estos sean más competitivos en el mercado nacional e internacional”.

Hizo énfasis en que ésta “es una medida que el Gobierno tomó a la ligera para beneficiar a la industria nacional pero que, sin darse cuenta, están afectando a la mayor parte de la cadena que es el comercio”.