El servicio que presta Transmilenio en la Troncal de la 26 se podría ver afectado pues la empresa contratista Coobus S.A.S, encargada de proveer los articulados, afronta procesos de multa por incumplimientos que suman $1,400 millones de pesos, lo que le impediría continuar con el contrato otorgado por el Distrito.
Para que Coobus S.A.S pueda seguir prestando los servicios a Transmilenio, necesita comprar 60 articulados, equivalentes a $140 mil millones de pesos, dineros que ninguna entidad financiera estaría dispuesta a prestarle por su actual situación económica.
El Alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro, recibió una carta de la firma Kreston RM S.A., revisores fiscales de Coobus, donde advierten la situación de la empresa y aseguran que “debilita su adecuado funcionamiento y pone en peligro su continuidad”.
En la misiva, la firma explica que en Coobus se presentan “claros síntomas de ingobernabilidad y enfrentamientos internos”, además de no contar con la información financiera oportuna.