Cientos de campesinos realizaron en Ciudad de México una protesta por la desaparición de 43 estudiantes en Guerrero, un convulso estado del sur del país, donde también hubo una marcha y cuyo gobernador ofreció una mesa de diálogo a los familiares de los jóvenes.
En la manifestación campesina que se desarrolló en la capital del país desfilaron 43 tractores en honor a cada uno de los estudiantes desaparecidos en la ciudad de Iguala, cuyas fotos se exhibían sobre las carrocerías de los vehículos.
"Nos solidarizamos con el movimiento social para reclamar al gobierno por los 43 estudiantes, para que los recuperemos con vida. El gobierno no ha hecho nada", dijo a la AFP Araceli Beltrán, una ingeniera agrónoma de 29 años, mientras marchaba con sombrero y pañuelo al cuello, al estilo vaquero.
Acompañados de una banda de música ranchera, los manifestantes se desplazaron por la transitada avenida de la Reforma hacia la secretaría de Gobernación (Interior), donde trataron de derribar las vallas dispuestas por cientos de policías para impedirles el paso.
El secretario de esta cartera, Miguel Ángel Osorio Chong, informó que un general del ejército, integrante de las tropas desplegadas en Iguala para buscar a los jóvenes, coordinará a todas las fuerzas de seguridad -federales, estatales y municipales- de Tierra Caliente, una violenta zona que Guerrero comparte con sus vecinos Michoacán, Morelos y Estado de México.
Los operativos en la zona, donde son frecuentes los secuestros, asesinatos, enfrentamientos armados y hallazgos de fosas clandestinas, deben darse "de manera plena, y que no, los límites de un estado con otro, nos hagan detener la estrategia de seguridad", dijo Osorio Chong.
De manera casi simultánea a la manifestación en Ciudad de México, pero en el municipio de Ayutla, Guerrero, unas 300 personas marcharon para exigir la localización de los estudiantes.
El gobernador, Rogelio Ortega, se unió al acto y ofreció a los familiares de los jóvenes una mesa de diálogo para el 11 de diciembre.
Ortega asumió la gobernatura luego que su antecesor, Ángel Aguirre, dejara el cargo ante la crisis que desató este caso.
Una serie de movilizaciones multitudinarias se han registrado durante las últimas semanas en la capital mexicana y en otras ciudades del país, para exigir la localización de 43 estudiantes de la escuela rural para maestros de Ayotzinapa (Guerrero, sur), quienes desaparecieron el 26 de septiembre tras una balacera ordenada por el alcalde de Iguala.
El ataque fue perpetrado por policías municipales coludidos con el crimen organizado, y según las investigaciones, los jóvenes pudieron haber sidos masacrados.