Los días en el poder del presidente sirio, Bashar al Asad, están contados, según dijo el presidente Barack Obama en una entrevista publicada ayer, donde añadió que Estados Unidos está trabajando para acelerar la transición a la democracia en ese país.
En una entrevista concedida a la revista mensual The Atlantic, Obama afirmó que "los días (de Asad) están contados. No es un asunto de si sucederá o no sino de cuando".
"Entonces, ¿podemos acelerar esto? Estamos trabajando con la comunidad internacional para hacerlo", agregó.
Obama reconoció también que Siria es un país más complejo que Libia, y que naciones como Rusia están bloqueando una acción de la ONU.
Sin embargo, apuntó a los esfuerzos de Estados Unidos mediante el grupo de "amigos de Siria" para promover iniciativas de ayuda humanitaria para aliviar a las ciudades atacadas por las fuerzas militares que responden a Asad.
"Pero ahora ellos también pueden acelerar una transición hacia un gobierno sirio pacífico, estable y representativo", afirmó. "Si sucede, eso sería una profunda pérdida para Irán", agregó.
Entre tanto ayer miles de personas salieron a las calles en particular en Damasco y Alepo, segunda ciudad del país, donde varios manifestantes fueron heridos cuando las fuerzas de seguridad dispararon contra la multitud, informaron militantes de ONG sirias.
"Miles de personas manifestaron el viernes en 12 lugares diferentes de Alepo, gritando consignas de apoyo a Homs (centro) y llamando a la caída del régimen y a armar el Ejército sirio libre (ESL)", afirmó un portavoz del comité de militantes en el terreno, Mohamed Halabi.
"Seis personas resultaron heridas cuando las fuerzas de seguridad dispararon con balas de guerra contra la multitud y otras 15 fueron detenidas./AFP