La reacomodación que vive el comercio colombiano ha generado cambios en el consumo de los hogares, y los almacenes de gran formato han sido pieza clave en ello.
La apreciación la hizo el director económico de Fenalco, Rafael España, en el marco de la celebración del Congreso Nacional de Comerciantes. El dirigente aseveró que la reacomodación del comercio es un reflejo de los cambios en la composición de los consumos de los colombianos.
Es decir que “hay un reacomodo interesante del comercio grande, que seguramente es un reflejo de los cambios en la composición de los consumos de los colombianos”.
“No sé si el DANE esté tomando nota de esas realidades porque parecer ser que el peso de los alimentos dentro de la canasta familiar de los colombianos ha venido disminuyendo”, comentó.
Según él, no de otra manera uno explica cómo mientras que en 2000, de cada 100 pesos que vendían los almacenes de gran formato, 40 pesos correspondían a alimentos y bebidas no alcohólicas. “Hoy esa relación ha bajado al 18%”, dijo.
Mientras tanto, productos de electrónica y de alta tecnología como celulares, computadores y tabletas, que antes no representaba más del 2% de las ventas de las grandes superficies, hoy ya llega al 25%.
El dirigente indicó que hay sectores que ganan y otros que pierden, entre estos últimos están los alimentos, productos farmacéuticos, libros, papelerías y artículos escolares.
En el caso de los productos farmacéuticos “sucede que gracias al avance que ha habido en el sistema general de salud los hogares ya no necesitan comprar la fórmula que le receta un médico sino que las reclaman en la EPS, en el Hospital o a través del Sisben”.
Para él, es un avance pero se refleja en una caída y parálisis de productos típicos de farmacias y van a tener que reinventarse, como ya lo han hecho algunas que muestran una gran exhibición de productos que no necesariamente son farmacéuticos.