El subsecretario del Partido Democrático (izquierda), el moderado Enrico Letta, fue designado para formar un gobierno de unidad nacional que saque a Italia de la parálisis política dos meses después de las elecciones legislativas.
"Llevamos 60 días sin un gobierno. Es una situación difícil e inédita, frágil, que no puede durar", reconoció Letta, de 46 años, tras haber sido convocado por el presidente de la República, Giorgio Napolitano para encomendarle la tarea.
Letta, niño prodigio de la política italiana, ex democratacristiano, deberá contar con el apoyo de todas las fuerzas políticas para poner fin a la grave parálisis política de la península.
Letta dijo que se tomará un tiempo para hacer sus consultas y acudirá de nuevo ante el presidente Napolitano para dar su respuesta definitiva y presentar su ejecutivo, tal y como prevé el complejo protocolo.
"Italia necesita respuestas inmediatas", adelantó, tras precisar que su gobierno "no nacerá a cualquier precio".
Según la prensa italiana, el gobierno asumirá el poder a finales de la semana y dará inicio a una serie de reformas para hacer frente a la emergencia social y económica, agudizada por las políticas de austeridad exigidas por la Unión Europea.
En declaraciones a la prensa tras su designación, Letta aseguró que entre sus prioridades figuran realizar una reforma de la Constitución que reduzca el número de parlamentarios y cambiar la ley electoral, culpable de la ingobernabilidad.
"Si volvemos a las urnas, se va a repetir la misma situación", advirtió, después de reconocer que "la política, toda en su conjunto, ha perdido credibilidad".
Se trata de una respuesta a los duros reproches lanzados por Napolitano durante su discurso de posesión, en el que tachó de "imperdonable" la negativa del Parlamento de adoptar las reformas necesarias por las fuertes divisiones internas.
Un joven experto en asuntos europeos
El futuro jefe de Gobierno, que fue europarlamentario y experto en asuntos europeos, precisó que pedirá a la Unión Europea que cambie la línea de "excesiva atención a la austeridad, porque no es suficiente".
"Italia necesita respuestas inmediatas", adelantó, tras precisar que su gobierno "no nacerá a cualquier precio".
Letta, con un largo recorrido como político al haber sido tres veces ministro y también subsecretario de la presidencia de gobierno con Romano Prodi (2006-2008), prometió atender a "esa parte del país que no aguanta más" la crisis económica, en particular los jóvenes, cuya situación es "insoportable", dijo.
El desempleo en Italia ha alcanzado cifras récord, afectando al 11,6% de la población. Una tercera parte de los jóvenes no tiene trabajo ni estudia, afectada por la recesión económica.
Napolitano, de 87 años, forzado a repetir mandato a pedido de los mayores partidos políticos ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo para la elección de su sucesor, manifestó su "satisfacción y serenidad" de cara al nombre de Letta.
"Es joven, incluso demasiado joven para el estándar italiano", ironizó Napolitano, quien elogió también su vasto recorrido político.
El segundo jefe del Gobierno más joven de la historia de la República italiana después de Giovanni Goria, que se convirtió en primer ministro en 1987 con sólo 43 años, Letta es menor que la mayoría de los actuales jefes de Gobierno europeos.
Su estilo, formal y sobrio, ha sido admirado por la prensa, que subrayó que llegó en su sencillo automóvil a la cita con el Presidente, algo anómalo para la criticada "casta" política italiana acostumbrada a contar con un conductor.
Sobrino de Gianni Letta, el hombre de confianza del magnate de las comunicaciones Silvio Berlusconi, representa a los sectores católicos de su partido, al borde de la implosión por sus divisiones tras la victoria parcial en las elecciones de finales de febrero.
Su eventual gobierno deberá gozar del apoyo del partido del magnate, quien adelantó que la mayor formación de derecha que lidera, el Pueblo de la Libertad, está dispuesta a otorgarle la confianza en el Parlamento.
El anciano presidente reiteró el miércoles que en el nuevo gobierno deben "confluir" amplias fuerzas, y les instó a comprometerse en un gobierno de coalición.
"Un gobierno formado con las grandes coaliciones es una píldora amarga para el PD", escribió Stefano Folli, del diario económico IL Sole 24 ore.
"Nace un gobierno de pacificación nacional", sostiene por su parte Massimo Franco, editorialista del Corriere della Sera
El nuevo ejecutivo deberá estar formado por miembros de todo el arco político, exceptuando el Movimiento Cinco Estrellas del cómico antisistema Beppe Grillo, la controvertida formación contraria a la emigración Liga Norte y la extrema izquierda de SEL (Izquierda, Ecología y Libertad).
Según cálculos de la confederación de industriales, Confindustria, dos meses sin gobierno costó a Italia un punto del PIB, mientras los mercados reaccionaron con calma, registrando la tasa de interés más baja en poco más de dos años./AFP