Deficitario es el balance en materia laboral del primer año del gobierno del presidente Santos en su segundo mandato, según el Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario.
Para llegar a esta conclusión el estudio toma como parámetro de evaluación el cumplimiento de las promesas de campaña y la gestión de la política laboral.
Iván Daniel Jaramillo, investigador del Observatorio, dijo que en materia de compromisos de campaña para la reelección presidencial, vale la pena recordar la promesa del presidente-candidato de corregir el desequilibrio en el sistema de cotización al Sistema Integral de Seguridad Social en Salud, por el cual los trabajadores activos cotizan en conjunto con los empleadores asumiendo el porcentaje de contribución del 4%, en contraste con los pensionados quienes asumen la totalidad de la cotización en el 12% de su mesada pensional.
“El 6 de junio de 2014, a pocos días de la segunda vuelta de la elección presidencial, el Presidente asumió el compromiso de reducir el aporte de los pensionados al 4%, promesa incumplida como consecuencia de la oposición del Ministerio de Hacienda por considerarla inviable en función de la insuficiencia de recursos para compensar la reducción de los aportes”, señaló Jaramillo.
A su vez, Juan Carlos Guataquí, investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, indicó que el 10 de junio de 2014 el presidente-candidato anunció el compromiso de presentar una iniciativa legislativa para restablecer las horas extras, iniciativa de campaña abiertamente contradictoria de la reforma laboral más importante del gobierno de Álvaro Uribe y que constituía, en consecuencia, elemento de diferenciación de su propuesta social que transcurrido un año resulta incumplida.
De igual forma, para los investigadores del Observatorio Laboral en materia de gestión de la cartera laboral, la medición de los cinco grandes pactos por el trabajo decente propuestos por el ministro Luis Eduardo Garzón arrojan más pendientes en el cumplimiento en cada uno de ellos.