Al cierre de la semana, la colectividad tuvo una reunión programática y de estrategia política y electoral. Más allá de las múltiples e importantes conclusiones, había en el aire tres interrogantes clave ¿Se despejaron? EL NUEVO SIGLO le preguntó a siete parlamentarios y al presidente del Directorio Nacional al respecto. Aquí sus respuestas
1. De cara a las elecciones al Congreso y a la Presidencia en 2014 ¿Cuál debe ser el núcleo del programa del Partido?
2. ¿Quién debe ser la cabeza de la lista al Senado? ¿Cuál es la baraja?
3. ¿En materia de campaña presidencial, qué debe hacer el Partido?
Carlos Ramiro Chavarro, senador
1. Primero el rescate del sector agropecuario, su salvación. El Partido siempre ha tenido coherencia en este tema y en este momento hay varias iniciativas de la colectividad. Hay que recordar que en diciembre del año pasado la destinación de un 30 por ciento adicional del impuesto CREE, que son cerca de 400 mil millones de pesos, fue una iniciativa que el Congreso aprobó y fue originada en el conservatismo. El Partido, en su plataforma programática, debe establecer una agenda de manejo de suelos, de política de alimentos y de productividad de muchos sectores, como la ganadería. También se debe rescatar la autoridad, ya que Colombia está viviendo unos momentos de falta de tolerancia y eso es falta de seguridad.
2. Hay varios nombres, lo que no se sabe es si van a aceptar la invitación. Tenemos figuras muy importantes, con diversidad de pensamientos y esa es la democracia. El Partido no es una colectividad donde hay uniformidad de posturas, pues sería un partido autócrata. En cuanto a nombres, ahí está Juan Carlos Echeverri, pero también hay congresistas que podrían ejercer ese liderazgo para encabezar la lista al Senado, como Roberto Gerlein.
3. El Partido debe tratar de convocar los liderazgos que tiene hoy en otros escenarios distintos a la política electoral, como Luis Alberto Moreno. Figuras importantes que podrían en un momento coyuntural del país ejercer un gran liderazgo frente a una elección presidencial. Una elección en la que el Partido tiene una gran posibilidad, porque el país está pensando cómo piensa el Partido Conservador. En Colombia hay mucho conservador, pero poco partido.
Oscar Fernando Bravo, representante
1. Fundamentalmente hemos estado enfocados en el tema agropecuario, que es una de las banderas de nuestro partido, y en la seguridad, que es otra de las preocupaciones del conservatismo. También alrededor el tema de la familia, la educación, la cultura. Pero creo que nos debemos enfocar en cómo recuperar la seguridad en todos sus aspectos: social, alimentaria, física, jurídica…
2. Aquí se presenta un fenómeno diferente a los otros partidos, donde hay una cabeza visible, que sobresale ¿Quién va a negar que Uribe es la cabeza del Centro Democrático, si es el candidato visible? En el partido Liberal entiendo que será Serpa. En el Conservador hay muchas cabezas, pero más regionales, más locales, cada quien es rey en su pueblo y, en ese orden de ideas, no tenemos una cabeza de lista que yo he reclamado. He postulado, por ejemplo, a Carlos Holguín Sardi, que debería ser la cabeza visible del Partido, pero entiendo que no quiere meterse. Por lo pronto se mantiene la idea de que por sorteo se va a definir la cabeza del Senado y que cada quien responda por su liderazgo regional.
3. Hemos propuesto que sea la Convención de diciembre la que defina el tema, una vez el presidente Santos haya aclarado si se lanza o no a la reelección. Ahí determinaremos si vamos con candidato propio o continuamos en la Unidad Nacional, que se promocionaría a través del actual Presidente. Pero oigo voces muy cercanas a la candidatura propia, al menos en la primera vuelta.
Fernando Tamayo, senador
1. El Partido tiene que centrar su acción en la defensa de la familia como eje central del funcionamiento de la sociedad; la familia con el compromiso de criar unos hijos y de formarlos, entregándolos con confianza a la sociedad. La defensa a la vida desde el momento de la creación hasta cuando de manera natural fallezca. También se debe defender al sector agropecuario, vamos a trabajar por una política agropecuaria. Hay que recuperar la credibilidad en la Justicia. De nada sirve que tengamos leyes si los ciudadanos no las conocen y no las reclaman en su aplicación.
2. Ese es un tema que no se ha tratado, pero aspiramos a que haya claridad en cuanto a la escogencia de esa cabeza de lista. Aspiramos a que sea alguien que realmente arrastre la lista y ayude a la elección de todos los que estén allí participando.
3. Estamos discutiendo el tema, lo ideal es que se tenga candidato propio, pero un buen candidato, no cualquier candidato; y de no encontrar un buen candidato, yo preferiría la opción de hacer una coalición que interprete de la mejor manera al Partido frente a la sociedad colombiana.
Omar Yepes, presidente DNC
1. Es lo que se va a definir en los próximos días. La semana pasada reunimos a distintas voces del Partido en el encuentro programático para escuchar y no tomar las determinaciones cerradas por parte del Directorio o en círculos menores. Estuvo todo el Partido por medio de los congresistas, directorios departamentales y figuras prominentes para que opinaran. Nos entregaron los insumos, el Partido los recoge en el Directorio nacional, los decanta y, finalmente, los entregará en la Convención del Partido.
2. No tenemos todavía eso definido, pero para mí cualquiera de los candidatos que el Partido va a entregar a consideración de la opinión pública puede ser cabeza de lista, pues son jefes de las regiones muy importantes y muchos de ellos han logrado consolidar una presencia nacional. De tal manera, que sería bueno tener una persona de un gran reconocimiento público a nivel general, de país, pero en términos generales cualquiera de los actuales congresistas o de los aspirantes que se han inscrito bien puede encabezar la lista.
3. Ese tema lo definiremos en diciembre. Vuelvo y repito las varias opciones: una, tener candidato propio, esa es mi aspiración personal, pero desde luego el Partido es el que tiene la última determinación. Dos, acompañar al Presidente si decide postularse de nuevo; y tres, que se oiga al expresidente Uribe y se busque un acuerdo político.
Jorge Hernando Pedraza, senador
1. No debe ser otro distintoque el Partido tenga conectividad con lo que la gente está queriendo, sintiendo y pensando. Es decir, lo que los colombianos quieren en las prioridades del día a día: la solución a la agricultura. El país entero ha entendido que hay que respaldar a los campesinos, por eso el proyecto de ley sobre retención a las utilidades financieras, busca que el sector financiero, que son los ricos de este país, le den el 8 por ciento de sus utilidades al sector agropecuario, que es el sector empobrecido. También está el tema de cobertura de las tecnologías para que tengamos una sociedad de la información y una sociedad con conocimientos. Ese es el nuevo nombre de la riqueza de un país: una sociedad informada. También debemos defender el matrimonio entre un hombre y una mujer, porque es un precepto natural y este partido tiene su doctrina social católica, aunque desde luego somos tolerantes con las parejas del mismo sexo. Creemos que el matrimonio tiene una función natural como es la procreación. O el tema de asumir el aborto como una actitud negativa, por ser este el Partido que defiende la vida.
2. Yo debería serlo, porque soy el número dos, soy el senador más joven, soy un senador impoluto, soy el senador transparente. Además de eso, el Partido debería pensar en la gente que tiene futuro y no en la gente que tiene pasado.
3. Seleccionar una persona que tenga todas las condiciones; que tenga, como decimos popularmente, el perrenque para no solamente agrupar a los conservadores, unirlos en torno suyo, sino que agrupe a los demás partidos, que sea una candidatura incluyente.
Roberto Gerlein, senador
1. El núcleo central debe referirse a la situación de la ruralidad colombiana, del campo, a la dificilísima de los campesinos y formular una propuesta seria sobre el apoyo presupuestal que el Estado debe dar a quienes producen en medio de las dificultades por la competencia extranjera por la vía de los Tratados de Libre Comercio. Desde luego que tengo muy claro que esta no puede ser una política indefinida, porque el mundo está marchando hacia una competencia abierta. No me gustaría que dentro de cinco años nos hubiéramos convertido en el Partido vocero del proteccionismo a ultranza para proteger el trabajo nacional. Creo que Colombia debe entrar en la competencia, pero hoy frente al problema del campo es bueno crear una salvaguarda en los tratados internacionales.
2. Cualquiera debe ser el cabeza de lista al Senado, porque la votación intuitu personæ que nosotros tenemos así lo amerita. Y más todavía cuando ni siquiera el nombre ni el rostro de quien encabece la lista aparece en el tarjetón. Yo hago campaña durante tres años o cuatro, en las elecciones me llamo C5, no aparece mi nombre ni mi rostro. En este caso carece de importancia el nombre de quien encabece la lista. Yo se los agradezco (a quienes han propuesto ni nombre) pero eso no cambia mi punto de vista.
3. Me parece que en política hay que actuar reconociendo las realidades. Y son muchas las coyunturas y realidades en las cuales he expresado que nosotros no deberíamos resolver el problema de la candidatura presidencial sino después de las elecciones de Congreso, cuando sepamos si tenemos 30 senadores, como dijo Eduardo Enríquez Maya, o 15 senadores. La presencia de los partidos en Congreso es lo que da una iniciativa para tener candidato propio o tener política de alianza.
Eduardo Enríquez Maya, senador
1. El conservatismo hace honor a su égida, la libertad y el orden, y, por supuesto, poner en vigencia una Justicia real que combata la impunidad, la congestión y garantice el libre acceso de los colombianos para buscar el respeto por sus derechos y el respeto por su dignidad.
2. La verdad si a mí me correspondiera decidir, no lo dudaría un instante: debería ser el senador Roberto Gerlein. Sería hacerle un homenaje a su larga lucha, a su capacidad y a los servicios que le ha prestado al país y al conservatismo. Y además, sería un justo homenaje al Caribe colombiano. Por eso, que esta sea una respetuosa invitación a mis copartidarios que tienen que definir ese trascendental asunto.
3. Según las directivas, el conservatismo ha puesto sobre la mesa de la democracia tres cartas, todas fundamentales. La primera, presentarle al país un candidato de estirpe conservadora, con programas nacionales, enarbolando banderas nacionales, es decir una candidatura donde quepan todas las manifestaciones políticas de Colombia. Si eso no es posible, una segunda carta sería estudiar la posibilidad de la reelección presidencial, siempre y cuando el Presidente manifieste su deseo; y una tercera, elegir un presidente en alianza con otros partidos.