Por unanimidad, los 18 miembros del Directorio Nacional Conservador (DNC) eligieron como presidente al exsenador caldense Omar Yepes y como su vicepresidenta a la quindiana Beatriz Elena Jaramillo.
En una reunión relámpago que se inició hacia el mediodía, se realizó el relevo entre el senador barranquillero Efraín Cepeda y Yepes.
Los integrantes de la colectividad le agradecieron la labor realizada por Cepeda y reiteraron que los conservadores irán con candidato propio a la presidencia.
En sus primeras declaraciones como jefe conservador, Yépez dijo que “asumo la presidencia como una gran responsabilidad y con el deseo de que el Partido Conservador se perciba en el país como una fuerza autónoma e independiente que piense en función de los problemas nacionales”.
Yepes señaló a partir de la fecha deben estar dispuestos a asumir el rol, sin temores de ninguna naturaleza. “Es decir”, aclaró, que el Partido Conservador “se sienta más bien locomotora que vagón, que jalone y que no lo jalonen”.
Por su lado, Jaramillo manifestó que su elección es una muestra de que el partido lo que quiere es la representación juvenil en el ejercicio político: “El mensaje más claro que se le envía al país es que el Partido sigue con las puertas abiertas para los lideres jóvenes”.
Jaramillo anotó que la colectividad no puede perder la vocación de poder y tenga candidato propio para la presidencia y también para otros estamentos de la política del país.
Recordó que en estos momentos tienen aspirantes propios y se continuara con las puertas abiertas para nuevas candidaturas. Dijo de la misma manera que por ningún momento se ha pensado salir de la Unidad Nacional ya que el Partido Conservador fue muy importante para su elección.
David Valencia, joven integrante del DNC, indicó que su gran reto es defender la política conservadora y ayudarla a construir: “Nosotros representamos una fracción del Partido, que pretende reconectarse con la juventud del país”.
El exministro Carlos Holguín anotó de manera puntual que el gran trabajo que les queda es llegar a la presidencia y reafirmar que existen.
“Creo que el partido se ha diluido frente a la opinión pública en una manera muy grande en la licuadora de la Unidad Nacional, ahora lo que hay que hacer es afirmar que existe”, resaltó.
Holguín recalcó que los colombianos deben tener presentes que el conservatismo piensa, decide, tiene banderas y que se va a presentar a las elecciones presidenciales, con el propósito de ganar las elecciones.
Para Holguín no necesariamente se debe salir de la Unidad Nacional porque quien la creó fue el jefe del Estado y él vera en que momento la rompe, pero sostuvo que el gobierno del presidente Santos “tiene cosas, no digo que todo es malo, pero tengo reservas y me duele mucho porque estoy hablando de la obra de un ministro de Hacienda conservador y una cosa nefasta, fue la reforma tributaria, donde clavaron a la clase media”.
La exministra Marta Lucía Ramírez consideró que el partido viene haciendo un proceso muy interesante: “se reformaron los estatutos, se tomó la determinación de tener una candidatura propia para las elecciones presidenciales y se asumió el compromiso de llevar una agenda programática para los colombianos como son la seguridad, la justicia y el empleo”.
Ramírez concluyó que la discusión de que si está en la coalición es un tema irrelevante: “Lo más importante era que se tomara la determinación de tener candidatura propia”.