Los congresistas no se resignan a dejar de tratar el tema de las escisión de partidos y así se lo alcanzaron a decir al presidente Juan Manuel Santos en la mesa última de Unidad Nacional.

“Yo he insistido ante la mesa de Unidad Nacional y ante el Gobierno que es necesaria una reforma política. El gobierno ha venido diciendo que no, pero el Ejecutivo consideró el tema con interés, porque necesitamos una reforma política que les de garantías a las actuales minorías y creo que el camino tiene que ver o con una circunscripción especial de minorías o con la escisión”, le comentó a EL NUEVO SIGLO el presidente del Senado, Roy Barreras, del Partido Social de Unidad Nacional (La U).

El senador Efraín Cepeda, presidente del Directorio Nacional Conservador, dijo que efectivamente se propuso que se presentara una reforma política, aunque en el tema no se amplió ni se profundizó, como tampoco sobre el transfuguismo.

“Yo personalmente expresé que nosotros en el partido no apoyábamos las reformas políticas cercana a las elecciones y que en principio el partido no estaría acompañándola”, le indicó a este Diario.

A propósito de las toldas conservadoras, el senador nariñense Eduardo Enríquez dijo que no está de acuerdo con esta posibilidad, porque no se puede legislar en beneficio propio: “El Congreso no puede estar legislando para satisfacer intereses personales cada que haya elecciones”.

Enríquez anotó que lo que deben hacer los partidos es fortalecerse en sus principios, en sus programas, con la finalidad que sea una opción sería para que se conviertan en las alternativas de poder.

El representante Simón Gaviria, presidente de la Dirección Liberal Nacional, expresó que “pensamos que es un derecho ya previsto en la reforma política que se debe reglamentar”.

John Sudarsky, senador del Partido Verde, aclaró que él no ha escuchado una discusión en ese sentido.

“No he escuchado que el Gobierno esté pensando en esa alternativa. Creo que el Gobierno en esa medida cometería un suicidio si lo hacen”, manifestó el congresista, reiterando que no ve ninguna motivación para que se lleve a cabo dicha alternativa y si lo hace lo que el Ejecutivo estaría haciendo era abrirle las puertas a que La U se divida: “Lo que estarían haciendo es darle espacio al expresidente Uribe”.

El presidente de Cambio Radical, el senador sucreño Antonio Guerra, señaló que en la mesa de Unidad Nacional lo se tocó la posibilidad de mirar algunos puntos de reforma política, pero que “simplemente se hizo un mención y no se entró en detalle”.

El representante Jaime Buenahoira, copresidente de La U, anotó que por ahora no se tiene nada claro y aseguró que puede ser una iniciativa presentada por los legisladores, reconociendo que hay algunos sectores interesados y que el tema sigue ahí.

“Cuando se habló de la reforma política se abordó el tema en torno al marco legal para la paz, que tiene dos ejes: una especie de perdón para que pueda haber una reincorporación a la vida civil y la participación política de los insurgentes. Pero eso es distinto a lo que se planteó frente a la escisión partidos o el transfuguismo”, dijo Buenahora.

 

No apoyan el tema

 

Entre tanto el senador Edinson Delgado, en su rol de vocero del Partido Liberal en el Senado, rechazó cualquier reforma política y manifestó que “lo que empezó siendo una gran apuesta del Gobierno terminó siendo una contradicción que a la postre debió ser punto de partida para la conciliación y el dialogó de lo que debe ser una nueva era de un nuevo proceso político”.

"Es claro que en Colombia se están realizando cambios en el plano constitucional y legal que están incidiendo en el establecimiento político colombiano, en dos sentidos principales: su capacidad de gobernar y la posibilidad de superar la confrontación”, admitió Delgado, pero considerando que para recuperar la institucionalidad el Gobierno debe liderar un proceso “con el acompañamiento de personas, líderes en la materia y de quienes rechazamos de plano estas iniciativas, con un aire fresco y diferente que fortalezca aspectos como la confianza y la credibilidad”.

El senador Armando Benedetti, de La U, dijo que ese tema no tiene pies ni cabeza y por lo tanto no ve posibilidad de que sea estudiado.

El vocero del conservatismo en la Cámara, el representante tolimense Alfredo Bocanegra, dijo que él no está de acuerdo que se cambien las reglas del juego, aun cuando apenas de inician la inscripción de cedulas: “Creo que es inconveniente y no corresponde a la respetabilidad de una democracia que se establezcan unas reglas que incidan en las variaciones en las elecciones, en la conformación de listas y la estructuras partidista, cuando faltan menos de un año a la inscripción de los candidatos”.

Bocanegra recalcó  que lo que se debe hacer es una demostración de consistencia democrática, de consistencia de las normas democráticas y por eso reiteró que para él es totalmente inconveniente.

También se mostró en total desacuerdo con la idea el representante por Bogotá, Germán Navas, del Polo Democrático, quien anotó que eso de la escisión de partidos es abrir paso a que se debiliten.

El senador Parmenio Cuellar, también del Polo, aseguró que de darse la escisión debe ser de forma permanente y no solo para las elecciones de 2014. Pero dijo que no lo ve viable porque sin el apoyo del Gobierno, no tendría mucho futuro.

Cuellar anotó que “la escisión partidista no está definida ni en la Constitución, ni en la ley. Pero como escindir quiere decir dividir, separar algo que está fraccionado, debemos entender como una reglamentación no propiamente del transfuguismo. Para mí la escisión no es el transfuguismo”

El legislador aseguró que la escisión es permitir el fraccionamiento interno, sin abandonar el partido. Puso como ejemplo que “el Partido Liberal se ha escindido varias veces: se escindió cuando el doctor López Michelsen fundó el MRL, que era un Partido Liberal radical. Pienso que tiene por objeto preservar la unidad del partido”.

El senador Juan Carlos Vélez, de La U, manifestó que si la escisión de partidos no tiene el apoyo del gobierno, tiene poca probabilidad de que pase en el legislativo.

“Lo que no sé es si el Gobierno ya cambió de postura, pero sería muy conveniente que lo dejara hacer. Tendría que ser un acuerdo de bancadas y se tendría que tener el respaldo del Gobierno indudablemente”, señaló el congresista antioqueño.

“Eso es disolver los partidos que están elegidos por voto popular, conlleva a que cinco o seis parlamentarios resuelvan irse para otra parte”, anotó.

El ministro del Interior, Fernando Carrillo, aseguró que “la teoría que se ha venido consolidando es que procuremos estabilizar las reglas de juego de carácter electoral”.

“Lo único que puedo decir es que como todo sistema democrático que tiene alguna fortaleza, lo que no sería de recibo sería cambiar las reglas de juego a escasos meses de iniciar el proceso electoral”, anotó el alto funcionario.

 

 

 

¿Qué es la escisión?

 

Luego de su revisión por parte de la Corte Constitucional, la ley estatutaria 1475 del 14 julio 2011, es decir la norma que reguló la última reforma política, el Acto Legislativo 01 de 2009, estipuló en su artículo 4 que “los estatutos de los partidos y movimientos políticos” deberían contener, entre otros asuntos mínimos, las “reglas de disolución, fusión con otros partidos o movimientos políticos, o escisión y liquidación”, a lo cual las colectividades deberán, según un parágrafo, adecuar sus estatutos “en la siguiente reunión del órgano que tenga la competencia para reformarlos”.

Más adelante, en el artículo 14, la ley habla específicamente de “disolución, liquidación, fusión y escisión de los partidos y movimientos políticos”, todo lo cual “se regirá por lo dispuesto en la ley y/o en sus estatutos”.

 

 

 

Propuesta del PIN

 

Tan pronto comience la segunda mitad de esta legislatura, el 16 de marzo, algunos representantes tienen pensado proponerle al Gobierno una iniciativa en ese sentido.

En declaraciones a este Diario, varios de ellos manifestaron que la idea es llegar con un acuerdo de bancadas.

Este acto legislativo sería un nuevo recurso al que acudirían los congresistas de algunos partidos minoritarios que ven difícil conservar sus curules en el Congreso al elevarse, como está previsto en la Constitución, el umbral del 2 al 3 por ciento en los próximos comicios.

El representante por el Valle del Cauca, Juan Carlos Salazar, que hace varios meses renunció al Partido de Integración Nacional (PIN), le expresó a este Diario que esta iniciativa sería posible solo si se tiene el apoyo del Gobierno Nacional.

“Lo que queremos hacer es buscar una alternativa similar a la del transfuguismo. Ese era un preacuerdo que había, pero que por falta de tiempo no se dio”, dijo Salazar.

Sin embargo por el momento hay que esperar que comience la legislatura porque el Gobierno persiste en su idea de no apoyar reforma alguna cuando las elecciones están próximas.