Asegurando que se siente orgulloso de ser “un hombre sin prejuicios”, el senador Roberto Gerlein, del Partido Conservador, insistió ayer en considerar la unión entre dos hombres como “sucias, no transparentes y antinaturales”.
“No tengo razones para retractarme, porque no he injuriado a nadie. Si no los he injuriado, si no los he atacado, no he mencionado a nadie, no puedo pedir disculpas por lo que pienso”, declaró el congresista del Atlántico a la prensa.
Al referirse a sus polémicas expresiones en la Comisión Primera del Senado, Gerlein reiteró que “expliqué claramente que en mi criterio el problema de ser gay es un problema genético que no se adquiría sino que se nacía con él, y que por infortunio tampoco se borraba”.
“No tengo ningún ánimo contradictorio con la persona que es gay, pero eso no significa que tenga que estar de acuerdo con todos los actos de una persona gay”, dijo.