Confirman condena por caso de Tame | El Nuevo Siglo
Viernes, 1 de Marzo de 2013

El Tribunal Superior de Bogotá, confirmó la sentencia condenatoria de 60 años de prisión en contra del señor Raúl Muñoz Linares, subintendente del Ejército para la época de los hechos, por los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo, sucesivo y heterogéneo con acceso carnal violento agravado en concurso homogéneo.

La confirmación de la sentencia respaldó la petición de la Unidad Nacional de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía relacionadas con el acceso carnal violento del que fue víctima una niña y la muerte de otros tres niños entre el 2 y el 14 de octubre de 2010, en el municipio de Tame, Arauca.

El Tribunal, también ordenó investigar a los testigos que participaron en el proceso, no solo por falso testimonio, como ordenó el juez en primera instancia, sino también por fraude procesal.

“Es cierto que el juzgador de primera instancia, en razón de lo q aquí expuesto, ordenó que se investigue penalmente por falso testimonio –y deberá hacérselo también por fraude procesal, añade el Tribunal- a los testigos que formularon esos agravios y cuya falsedad quedó evidenciada en el juicio”, reza la sentencia de la Sala Penal de Tribunal Superior de Bogotá en su página 47.

Igualmente ordenó investigar a los defensores que asistieron a Muñoz Linares, tanto a quienes lo asistieron inicialmente, como a quien lo apoderó durante el juicio, para determinar si incurrieron en faltas contra la ética.

“Y ordenará también que, si hay lugar a ello, se investigue, pro el mismo motivo, a la psicóloga que concurrió al juicio como perito dela defensa”, agrega la Sala Penal del Tribunal, en otro de los apartes de la sentencia, página 48.

El Tribunal también confirmó la decisión de primera instancia para que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, ICBF, diseñe y ejecute un plan integral de atención para la menor violada y a su familia, actualmente en estado de desplazamiento, como también al señor José Álvaro Torres, padre de los tres menores asesinados; orientado a superar, hasta donde sea posible, los profundos traumas generados por esos hechos.