Que la Administración distrital no le haga ‘conejo’ a los gremios, a los transportadores, comerciantes y a los mismos ciudadanos, al emitir el proyecto de Decreto de Movilidad de Carga contrario a lo trabajado durante las mesas del Observatorio de Carga, espera el director de Fenalco Bogotá-Cundinamarca, Juan Esteban Orrego.
Con el proyecto de decreto de Movilidad de Carga, el impacto económico y social afectará no solamente a los empresarios, proveedores y comerciantes, sino al bolsillo de los bogotanos, dijo el dirigente gremial.
“La capital perderá entre 3 y 4 horas de operación logística de distribución, reduciendo un 30% de la capacidad actual de la movilidad de carga de la ciudad”, dijo Orrego.
“Vemos con gran preocupación, que el proyecto de decreto no incluyó nuestras observaciones sobre la falta de infraestructura o en la realización de un plan piloto para implementar esta medida en varias zonas de la ciudad, la cual impactará en la convivencia y bolsillo de los ciudadanos”, agregó.
Entre las principales preocupaciones del gremio, está la restricción en La Candelaria, donde se plantea que el cargue y descargue sea nocturno y con vehículos de menos de 3,5 toneladas. Fenalco acordó la posibilidad de plantear una zona piloto, para desarrollar entregas nocturnas coordinadas y articuladas con autoridades, comercio y proveedores ya que hay que garantizar a comerciantes y proveedores la seguridad que implica el trabajo en la noche.
Es decir, que la medida entrará en funcionamiento en toda la localidad sin contar con un plan de previsión que articule a los actores en mención, lo que puede ocasionar un problema de seguridad para comerciantes y habitantes del sector.
Otro punto es que en aquellas vías por donde circule el transporte público como colectivos y vehículos que hacen parte del Sistema Integrado de Transporte Público, los comerciantes y proveedores únicamente podrán cargar y descargar en la noche, situación que afectará en los costos de logística y operaciones.