Junto a Francisco Pérez Yoza, los agentes de Policía Ferney Enrique Galvis Rojas y Oswaldo Villamil Torralba también fueron sentenciados a 8 años de prisión por el mismo hecho.
Los procesados fueron hallados responsables de la interceptación ilegal a los teléfonos celulares del exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia, Iván Velásquez, quien fuera el encargado de las investigaciones en contra de los nexos de políticos con grupos armados ilegales.
Estas personas deberán responder por los delitos de fraude procesal, falsedad ideológica en documento público, violación ilícita de comunicaciones agravada, concierto para delinquir y cohecho propio.
La Fiscalía delegada en el caso también los acusó de interceptaciones telefónicas a la delegada de la Procuraduría, Alexandra Valencia Medina, en hechos registrados el 5 de agosto de 2009.
En la cárcel La Picota en Bogotá cumplirán la pena los hoy condenados.